El fallecimiento de un varón, por causas naturales en la madrugada de ayer, en la verbena de las fiestas de la parroquia de O Sisto (Dozón) ha puesto en evidencia una vez más la insuficiencia de las ambulancias del 061 que operan en las comarcas. La Consellería de Sanidade mantiene desde hace al menos una década los mismos recursos en Deza y Tabeirós, con tres vehículos para cubrir un territorio que supera los 1.700 kilómetros cuadrados con una notable dispersión geográfica que, además, presenta un elevado índice de envejecimiento.

En torno a las 4.30 de la madrugada se reclamaba la presencia de medios sanitarios para atender a un sexagenario que se había sentido indispuesto en el campo de la fiesta de O Sisto, pero la ambulancia tardó algo más de 45 minutos en llegar y cuando se presentó ya nada se pudo hacer por salvar la vida de un vecino de Ourense que disfrutaba de la velada. Según testigos presenciales, varias personas trataron de practicarte una compresión abdominal por si se trataba de un atragantamiento y luego lo tumbaron para realizarle una reanimación cardio-pulmonar, pero la víctima no llegó a recuperarse y falleció.

Según ha podido saber esta Redacción, a esa hora las dos ambulancias con base en Deza estaban ocupadas. La de Lalín se había trasladado hasta Agolada para atender una emergencia y la de Silleda había sido requerida dentro del propio municipio por un dolor torácico. Finalmente la de Trasdeza fue desviada hasta O Sisto, pero su desplazamiento fue en vano. Este episodio provocó indignación entre muchos de los presentes, dadas las circunstancias de que se trataba de un espacio público con numerosas personas.

Este fatal desenlace ejemplifica, que tres ambulancias se antojan insuficientes para dar cobertura a su área de influencia y en numerosas ocasiones el 061 debe movilizar a vehículos de otras localidades para atender emergencias. Además, no conviene perder de vista que los tres vehículos de transporte sanitario operativos en Deza y Tabeirós son ambulancias asistenciales, lo que técnicamente se denomina de Soporte Vital Básico (SVB); es decir, ninguna es medicalizada. Mientras otros concellos limítrofes como O Carballiño acaban de sumar otro vehículo asistencial -con un territorio mucho menor, además de su proximidad a Ourense, donde además existen hospitales públicos- Deza mantiene los mismos medios y en el último concurso del 061 -de mediados del presente año- a la comarca se le volvió a negar una mejora de recursos asistenciales y, como mínimo, hasta 2023 no podrá acceder a una ambulancia de Soporte Vital Avanzado (SVA) como se reclamó en varias ocasiones por parte del Concello mediante acuerdos plenarios de la corporación municipal.

Tampoco con el CIS

Por otro lado, la puesta en marcha del futuro Centro Integral de Saúde (CIS) de Lalín tampoco supondrá una mejora en estos servicios, pues tal y como se desprende del plan funcional, en esta infraestructura se reserva espacio para una ambulancia solamente.