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La catalogación del material del Castriño no avanza desde hace al menos cinco años

La firma que realizó la excavación y encargada de su custodia aduce que razones económicas condicionan este ingente trabajo -Patrimonio convocó a sus representantes a una reunión

Fernández Pintos, ante la excavación en 2007. // Bernabé/Javier Lalín

La catalogación del "tesoro" localizado en el Castriño de Bendoiro se encuentra actualmente como hace al menos un lustro: sin finalizar y con un ingente número de piezas por valorar como estaba previsto en el trabajo encargado a una empresa especialista en arqueología. Razones de índole económico parecen el principal escollo para que la sociedad Desenrolo e Obras de Arqueoloxía SC pueda completar una actuación de la que a comienzos de 2015 ya advirtió que podría demorarse durante "años". Las más de 30.000 piezas aparecidas durante las excavaciones realizadas con motivo de las obras del Tren de Alta Velocidad (TAV) a su paso por esta parroquia lalinense siguen estando en poder de la empresa, que acaba de ser convocada por Patrimonio a una reunión, prevista para dentro de unos días.

La arqueóloga y responsable de la empresa, Pilar Fernández Pintos, explica que la situación del hallazgo de Bendoiro es similar a la de otros muchos; está sin estudiar en su conjunto y no solo por dinero. La científica reconoce que su empresa recibió un encargo y elaboró un presupuesto en base a una estimación que luego fue muy superior, por lo que entiende que un acuerdo económico extraordinario podría ser una de las claves para desatascar la catalogación de los vestigios de la fortificación. Preguntada sobre su la entrega del material a una institución pública para que buscase otras fórmulas con las que avanzar en este proceso podía ser una solución, la profesional explica que el material no es independiente de otros recursos como dibujos, registros y que debe pensarse en una intervención en su conjunto y contextualizada tomando como base el trabajo de campo en el castro. "Además, mientras no se entregue, soy la responsable de la custodia del material y si lo lleva alguien habría que ver quién asume la responsabilidad de hacer o no el trabajo", dice. Subraya que su compromiso era, efectivamente, la catalogación de las piezas para ser entregadas luego al Museo de Pontevedra. Y su intervención fue determinada en base a las directrices de Patrimonio. Como en el túnel del tren cercano al castro de Bendoiro, la luz sobre este asunto no acaba de visualizarse y la propia empresa reconoce que efectivamente la entrega de los materiales debidamente catalogados ya está fuera de plazo. También cree que quizá deberían estar custodiados en un espacio museístico.

En lo que respecta a la posible exhibición de materiales en el Pazo de Liñares -como siempre fue deseo del alcalde lalinense, José Crespo- manifiesta que en este tipo de hallazgos se suelen seleccionar algunos restos más representativos y el resto del material permanece guardado en cajas debidamente identificadas. La arqueóloga lamenta en cierto sentido que con el dinero del 1% Cultural -no en este caso sino en otros semejantes con los que pudiese toparse el ministerio- no se reservase una partida económica para financiar tanto las posibles intervenciones arqueológicas como la posterior catalogación de los hallazgos.

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