El reciente fallecimiento del agente Victorino Fernández Gil ha hecho que la Policía Local de Lalín haya visto como en los últimos años ha ido mermando de manera considerable su dotación. El cuerpo, que llegó a contar con 18 efectivos en su plantilla, cuenta en la actualidad con 13 incluido un cabo y el inspector-jefe Jesús López Cuñarro. Esta reducción de agentes ha ido en detrimento de su eficacia, tal y como reconocía ayer mismo el propio Cuñarro. "Esto es algo que viene de atrás porque en su momento no se si se podía, pero la realidad es que no se intentó ir cubriendo las plazas que quedaban vacantes", explica el inspector que también recuerda que tal y como recomienda la ley "ahora mismo harían falta entre 18 y 20 personas en el servicio, pero esto sucede en todas partes y, desgraciadamente es el pan nuestro de cada día".
Jesús López Cuñarro hizo llegar en 2017 a la Alcaldía dos informes donde se abordan tanto el estado precario del cuerpo como lo consideraba por él como deficiente gestión del mismo "porque había servicios que no estaban suficientemente cubiertos". Se trata de sendos escritos presentados en los meses de abril y junio de ese año donde el inspector-jefe solicitaba por un lado que se le aclarase el sistema de designación de turnos y por otro mostraba su desacuerdo con el cuadrante de servicios elaborado para la plantilla. De todas formas, el responsable del cuerpo indica que "estoy esperando para ver lo que pasa pero tengo entendido que tienen toda la intención de cubrir las plazas que puedan". López Cuñarro quiere subrayar que en uno de aquellos escritos presentados en su momento al anterior alcalde, Rafael Cuíña, se quejaba de que "a mí me quitaran ciertas atribuciones y competencias con lo que no estaba de acuerdo y no me parecía nada normal. Al final, cada uno hacía lo que quería en la policía porque se pedían asuntos propios cuando se quería y se cogían días libres cuando se quería sin que yo pudiera hacer nada. Había servicios en los que había cuatro personas y en otros solo había una y lo que hice fue mandar el escrito denunciando esa situación y, además, cubriéndome las espaldas porque yo no asumía la responsabilidad de lo que pudiera pasar. Sin embargo, la contestación que tuve fue el silencio. La cosa siguió totalmente igual y cada día empeorando más". Cuñarro reconoce que esa situación se ha podido paliar algo aunque "lo que pasa que ahora tenemos menos personal del que había".
En los documentos presentados en 2017 por Jesús López Cuñarro, y a los que ha tenido acceso esta Redacción, el inspector-jefe solicita que se le informe de "cuál es el criterio para la autorización de los cambios de turno, ya que entiendo que los mismos deberían ser concedidos por parte de quien corresponda para de esta forma poder cumplir adecuadamente con mis funciones de jefe del cuerpo". En el otro escrito Cuñarro hace constar "mi disconformidad con la situación creada en el cuadrante de servicios y que se reconsidere para restablecer un servicio más seguro para los agentes de esta plantilla y más eficaz para los vecinos de Lalín y personas que se acerquen a esta localidad". El propio responsable del cuerpo policial municipal lalinense también desveló ayer que el actual regidor municipal, José Crespo, ha sido informado personalmente por él de la situación por la que está atravesando la policía local, aunque de momento se desconoce la postura de la Alcaldía sobre este asunto.
