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El mercado inmobiliario en la capital de la comarca dezana

Lalín dispone de bajos y locales vacíos en pleno centro con un valor superior al millón de euros

En total son 930 metros cuadrados de superficie repartidos entre el solar del antiguo Cine Balado, el bajo de la llamada Casa de Don Álvaro Goyanes, el de Abanca en Matemático Rodríguez y la vivienda de Maruja Gutiérrez

Vista de los edificios del Cine Balado y la antigua sucursal de Caixa Ourense. // Bernabé/Gutier

Al igual que sucede en las grandes ciudades, el centro urbano de Lalín ha visto como con el paso del tiempo aumentaron los locales y bajos en lo que se suele denominar como la "milla de oro", o centro neurálgico de la localidad. En concreto, en la cabecera comarcal dezana éstos se concentran en un radio formado por las fincas que albergan el antiguo Cine Balado, el bajo de la conocida como Casa de Don Álvaro Goyanes, otro en Matemático Rodríguez donde todavía Abanca mantiene operativo un cajero automático y, finalmente, la vivienda de la profesora Maruja Gutiérrez. Todos tienen en común el estar hoy en día vacíos a la espera de compradores o inquilinos, ocupando una superficie superior a los 900 metros cuadrados y, según fuentes consultadas por esta Redacción, tasados en su conjunto en más de un millón de euros.

Sin duda alguna, la auténtica "joya de la corona" de esta oferta inmobiliaria en el corazón de Lalín está constituida por el solar que ocupan el antiguo Cine Balado y el edificio contiguo que albergó en su bajo una oficina de Caixa Ourense. El cine es propiedad de la Fundación Abanca, mientras que el resto lo es de la entidad financiera viguesa, con una superficie total que ronda los 500 metros cuadrados. Desde que ambos inmuebles son propiedad de Abanca, ésta escucha ofertas para poder alquilarlo o venderlo al mejor postor. Cabe destacar que por ambos se llegó a pedir en su momento la nada despreciable cifra de un millón de euros -500.000 euros por cada uno de ellos-, pero finalmente nadie se animó a comprar por esa cantidad. La casualidad ha querido que muy cerca de allí, en la calle Joaquín Loriga esquina La Molinera, la Sareb pusiera a la venta el pasado mes de junio hasta 15 viviendas de nueva construcción. Los precios, de pisos de entre una y cuatro habitaciones, oscilaron entre 78.000 y 159.000 euros en una promoción de hogares que quedó a medio rematar a consecuencia de la quiebra de la constructora que se hizo con esta manzana en el corazón del casco urbano lalinense.

Abanca también es la propietaria del bajo donde hasta hace poco mantenía abierta una sucursal en la calle Matemático Rodríguez. La unificación de todas las oficinas en la calle Joaquín Loriga hizo que este local también se encuentre en venta o alquiler, pero que mantiene en funcionamiento su cajero automática por parte de la entidad olívica. En este caso, se tratan de unos 200 metros cuadrados de superficie cuyo alquiler podría rondar los 1.5000 euros, según el mercado actual de arrendamientos. También alquilada estuvo en las pasadas elecciones municipales la emblemática planta baja de la casa de Don Álvaro de Goyanes en pleno Kilómetro Cero para albergar la sede de Compromiso por Lalín. El propietario del local también escucha ofertas para los aproximadamente 130 metros cuadrados del espacio, aunque siempre ha reconocido que no tiene previsto venderlo.

Por último, la coqueta vivienda de la educadora Maruja Gutiérrez también espera inquilino después de ver como se cerraba el establecimiento de hostelería que durante casi tres años ocupó sus 100 metros cuadrados de superficie. El edificio está en manos de varios propietarios y tras la profunda restauración efectuada por su último inquilino podría acoger cualquier tipo de negocio enfrente del monumento dedicado a Loriga.

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