El grupo parlamentario del BNG elevará a la Cámara autonómica una proposición no de ley para exigir a la Xunta que apruebe de inmediato un plan de gestión del jabalí. Uno de los representantes del partido, Xosé Luis Rivas Cruz, Mini, dio a conocer esta mañana la iniciativa en Lalín acompañado por representantes locales de su formación.

Tanto Rivas como el portavoz del BNG en Lalín, Francisco Vilariño, critican la moción que llevó al pleno lalinense el PP, en la que solo se exigían medidas de control al Estado, "negando en la práctica las competencias gallegas". Fue lo mismo que hizo, el 28 de agosto, el PP provincial de Lugo. Rivas incidió en la "mala intención y la incompetencia tremenda" del gobierno autonómico, que ya en 2014 prometió un plan de gestión dotado con más de un millón de euros, y en 2016 anunció otro, en colaboración con la Universidade de Vigo, por unos 2,4 millones. Pero esos dos intentos llegaron a materializarse. Es más, desde 2016 "no tuvimos ayudas ni a la prevención ni a la paliación de daños". Y la convocatoria de este año, como indica el parlamentario, "es un copia y pega" que no incluye cultivos de huerta como guisantes y judías.

La proposición no de ley urge ese plan de gestión para calcular el censo de jabalí con la mayor exactitud posible, para saber también cuál es su incidencia por comarcas y qué medidas deben protocolarizarse para manejar la dimensión de la especia y reducir los daños en cultivos. Al conocer la población de jabalí, la Xunta podrá declarar este animal como plaga, según contempla la normativa. El plan de gestión es necesario también para afrontar medidas de seguridad contra la amenaza de la peste porcina africana y, también, para controlar a dónde se distribuye toda la carne que se caza.

La proposición no de ley pide una partida presupuestaria anal que cubre las pérdidas económicas, ya que en la actualidad marca un tope de 1.650 euros, mientras que en algunas granjas los destrozos alcanzan los 34.000. A ojos del BNG, tampoco son efectivas medias de prevención como pastores eléctricos en una comunidad donde una granja puede tener 20 fincas separadas entre sí. EL BNG pide conocer, también, las iniciativas que presentó la Xunta en la Conferencia Estatal Sectorial de Agricultura.