Nueve meses después de su arranque, ayer se clausuró el taller de empleo Foresta Lalín, con la entrega de los certificados a sus 20 alumnos. Al acto de clausura acudieron además representantes de las cuatro comunidades de montes de A Moa, A Xesta, Bermés y Zobra. En ellas el alumnado realizó tratamientos silvícolas, repoblaciones o trabajos de prevención de incendios. Asistieron, también, los ediles del anterior gobierno Miguel Medela y José Manuel Fernández Taboada, vinculados a este taller porque en su ejecutivo llevaron, respectivamente, las áreas de Medio Rural y Emprego.

La clausura estuvo presidida por la edil que ahora coordina precisamente Emprego, Karen Fernández; el alcalde, José Crespo; el delegado territorial de la Xunta, José Manuel Cores Tourís; y el xefe territorial de Economía e Emprego, Ignacio Rial. Tanto la concejala como el regidor señalaron la disposición de su gobierno a respaldar cualquier iniciativa que presenten los alumnos, una vez rematado este periodo de formación. "Es un punto de arranque de una nueva etapa, y las capacidades con las que os enfrentáis son más importantes que hace un año", indicó la concejala, quien recordó que ella también optó por emprender, en el sector del comercio, hace 15 años.

Desde la Alcaldía, José Crespo recordó que el gobierno local publicó días atrás incentivos para las empresas que deseen incorporar a alumnos de este taller. Son 8 los participantes que se ciñen a esta posibilidad. La empresa que decida incorporar a estos trabajadores por al menos tres meses recibirá 1.500 euros por cada fichaje. Crespo confía en que con esta iniciativa los alumnos del Foresta Lalín tengan un alto porcentaje de inserción laboral. Pero también los animó a emprender o a montar sociedades entre ellos, puesto que el sector forestal "es un campo con muchas posibilidades a escala gallega, y está muy poco investigado". Sin ir más lejos, el Concello de Lalín tuvo que contratar a cuatro empresas para desbroces, ya que era incapaz de poder asumir todos los trabajos con la maquinaria municipal, como indicó el regidor.

Crespo señaló que mientras en otras latitudes como la Selva Negra alemana el sector forestal goza de una excelente gestión, en las tierras gallegas el aprovechamiento de estos recursos continúa siendo una asignatura pendiente. "Las potencialidades van más allá del eucalipto", recalcó, a la par que incidió en que el ámbito forestal también puede contribuir a frenar la despoblación del rural, que ya acucia a la provincia de Ourense, con varias aldeas abandonadas en venta. Si sigue la sangría, "en 10 años habrá miles en Galicia", aventuró el munícipe.

Crespo tuvo palabras de agradecimiento para Miguel Medela, así como para el equipo docente y para la Xunta por "la concesión de este taller innovador", del que espera poner en marcha una segunda edición, como le sugirió a Cores Tourís. Para Crespo, el éxito de este primer Foresta Lalín no podrá medirse hasta ver el alcance de la inserción laboral de sus alumnos. En este sentido, apuntó que la creación de empleo es una de las metas del presente mandato, ya que "no se trata solo de polígonos industriales o de dinamizar el comercio". Así, recordó que con la entrada de Lalín en el proyecto Doing Business de la Xunta, será posible reducir impuestos a las empresas (mediante el cambio de ordenanzas, que será en meses) para que no paguen el ICIO o que se les pueda deducir el IBI hasta el 95%, como ocurre ya en otros municipios adheridos como Silleda, Dozón o Vila de Cruces.

Crespo fue el último en intervenir, tras los breves discursos de Ignacio Rial y José Manuel Cores Tourís. El primero se dirigió a los participantes afirmando que "sois una promoción privilegiada, porque vais a tener un certificado que posee poca gente, en un sector por el que la Xunta apuesta de manera firme. Esperamos que este tipo de actuaciones os sirvan para encontrar trabajo en el día de mañana". Por su parte, Cores Tourís tildó la jornada de ayer de "agridulce", porque si bien el alumnado obtenía su certificación, también remataba nueve meses de formación en los que, al margen de las mejoras en las comunidades de montes, también se tejieron lazos de amistad entre los alumnos.

Tourís dejó claro que desde la Xunta "vamos a seguir apostando por la formación", con una inversión de 135 millones de euros en medidas de orientación y cualificación. A nivel provincial, este año tuvieron lugar 26 talleres, en los que participaron 487 alumnos. La inversión en la provincia rondó los 6,4 millones de euros. Por lo que respeta a Foresta Lalín, la aportación autonómica fue de 288.807 euros, que se elevan a los 1,2 millones de euros si hablamos de los seis talleres aprobados para Lalín desde el año 2009.