Aunque a paso lento, la comarca de Deza apuesta cada vez más por el cultivo de girasol que tiene muchas ventajas, entre ellas que no sufre los ataques de los depredadores, que aporta muchos nutrientes, soporta mejor la sequía, no necesita herbicidas y es más rentable que el maíz, tal y como indican expertos. En Cobideza esperan llegar a las 40 toneladas este año.
"La campaña este año va a ser excelente, porque el girasol es una planta que se adapta muy bien a las temperaturas extremas y a la sequía y lo lleva muchísimo mejor que el maíz, pero como todo, el agua con sol hace milagros", explica Román Santalla, presidente de la cooperativa Cobideza, que señala que lo único que necesita para que la campaña continúe así de excelente es mejorar la temperatura, porque a día de hoy ya tiene un tamaño considerable. "Le pasa igual que al maíz, que creo que será un buen año para ambos en kilos, pero a ver si cría más grano, porque hasta ahora las temperaturas han sido bajas".
Cobideza cree que este año llegará a las 40 toneladas de materia bruta "o si ensilamos más tarde, un poco menos", indica Santalla, quien calcula que en la comarca se siembra entre 70 y 100 hectáreas de girasol en parcelas pequeñas. "No hay grandes extensiones como sí hay de maíz, y la gran mayoría es para mezclar y hay que recordar que el girasol tiene una subvención aproximadamente de 45 euros la hectárea", indica el presidente de Cobideza.
La cooperativa continúa con la idea de ensilar este producto solo. Esta planta prescinde de herbicidas insecticidas y de incluso, de fertilizantes, solo se le echa purines. "Es una producción extraordinaria, pero para ensilarlo solo creo que tendríamos que recogerlo entre 10 o 15 días más tarde o quizás, no sembrarlo tan tarde, porque lo hacemos en torno a un mes y medio o dos más tarde que el maíz", explica Santalla que cuenta que algún compañero de la cooperativa ya lo hizo y el resultado fue bastante bueno. "Porque el girasol si se ensila cuando está muy tierno, es decir con mucho aceite, provoca dificultades a la hora de trabajar con él, sobre todo si se utiliza maquinaria".
El cultivo de esta planta se va introduciendo lentamente en la comarca y en muchos casos, se debe a la falta de información y de conocimiento sobre el mismo o a que los ganaderos no apuestan por la innovación, tal y como indica Rafael Pérez, multiplicador de semillas de Zaragoza que vende las semientes a Cobideza desde hace unos ocho años y que es el dueño de la genética del girasol Rumbosol- 91, girasol especial para uso forrajero. "Hoy por hoy el girasol es la energía más barata que hay, pero por comodidad los agricultores continúan con el maíz porque es lo que han hecho toda la vida, también por desconocimiento o por comodidad a la hora del ensilado, y muchas veces pesa más la comodidad frente a la economía y es fundamental innovar", subraya Pérez. Los girasoles contienen entre el 9 y 13% de materia grasa. "Está demostrado en la cadena alimenticia que el girasol cuando lo comen las vacas esto influye en la leche y es mucho más saludable, pero hay muy poco profesional que sabe valorar esto y la industria lechera tampoco es capaz de hacerlo", recalca Pérez. Por ello, los expertos aconsejan su cultivo por las múltiples ventajas que tiene.
