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Faena que tu bolsillo llena es buena faena

La mostras de artesanía y los campamentos musicales de Agolada repercuten en positivo en la economía de los distintos negocios

La 'feira do doce' de Agolada congregó ayer a gran afluencia de visitantes. // Bernabé/Ana Agra

Agolada despidió ayer su XXIII Mostra de Artesanía que en cuanto a programación no defraudó, pero las condiciones meteorológicas no fueron las más idóneas y por momentos, deslucieron la cita. Ayer coincidió, como cada año, con la feria mensual que es una, por no decir, la mejor del año, debido a la presencia de veraneantes en la zona. En general, la localidad se llena de eventos en la época estival lo que repercute favorablemente en la economía de los distintos negocios.

Hasta las peluquerías llega más gente para ponerse guapa para asistir a los distintos actos, las gasolineras despachan más combustible, los supermercados amplían sus ventas y los bares y restaurantes se llenan, por lo que hacen su agosto. Es a finales de junio, con sus fiestas patronales en honor a San Pedro y San Pablo, cuando arranca el calendario de actividades y el mes de julio está a rebosar con los distintos campamentos musicales. La programación se completa con las dos muestras de artesanía, la de julio y la de agosto, que dan vida a la villa. "Hay mucha gente, que repercute muy favorablemente en los negocios: restaurantes a tope y en las cafeterías y comercios se nota mucho y hoy Agolada se llenó de gente", indicaba ayer Inma Galego, la animadora sociocultural del Concello y la persona encargada de organizar cada año la muestra de artesanía y que lo hace cuidando cada detalle para que todo salga a la perfección. Galego cuenta que los feriantes se hospedan en el hostal de la localidad, hay otros que deciden pasar las noches en sus furgonetas y que el Concello también pone a disposición casetas de Os Pendellos para que puedan pernoctar allí.

"Hace unos años quizás se percibía más ambiente en la feria de julio, pero ahora poco a poco está más en auge esta y ahora más o menos hay gente por igual en las dos", apunta el responsable de la bocatería y pizzería Moderno, que puntualiza que "agosto es agosto y se nota en todos los lados, antes se notaba prácticamente junio y julio, pero ahora agosto es el que más funciona y el resto está todo más parado." Es consciente de que la lluvia deslució la muestra. "Al haber mal tiempo provocó que hubiese menos gente, porque nosotros tuvimos mucha, pero si hiciese bueno, seguro que habría más porque el tiempo influye mucho". En las citas con la artesanía, en su bocatería sobre todo tiene mayor cantidad de clientela por las noches. "A las cenas es cuando más se nota, porque al mediodía la gente come más de plato, pero en el pueblo claro que afecta positivamente", recalca. Para este local julio también fue positivo gracias a los campamentos musicales . "Se notaron muchísimo, sobre todo en la venta de bocadillos y como nuestro local es pub también se nota en la venta de copas, sobre todo durante el campamento de percusión", indica el gerente del Moderno, que confiesa que "nosotros durante el año hacemos poquísimo y el verano sirve para compensar el invierno, que aquí es muy duro".

Más movimiento

Desde la Parrillada Agolada también se constata los buenos resultados. "En la anterior artesanía hubo más movimiento de artesanos, porque incluso cerraban sus puestos y por la noche, se quedaban a cenar en el pueblo, pero ayer hubo tantísima gente, tanto tenderos, como gente de paso como de aquí", indicaba una responsable ayer, que subraya que "la feria de agosto, siempre es la feria de agosto y da gusto ver el pueblo con tanta afluencia de gente, aunque las ferias ya no son lo que eran, son muy buenas cuando caen en festivo o las de julio y las de agosto, porque la localidad crece mucho en verano", apunta. La responsable de este establecimiento cuenta que "el domingo no ayudó el tiempo, pero ver la plaza a medianoche llena de gente, eso no es habitual y estas cosas ayudan mucho a dinamizar el pueblo".

Desde el Hostal Galicia su gerente también comenta la gran afluencia de gente en la época estival. "La muestra de artesanía de julio claro que afectó mucho, pero en agosto, haya feria o no, es un mes que para la hostelería siempre es bueno, sea aquí o en cualquier lugar", recalca e indica que su local se llena todos los fines de semana del verano, pero con la artesanía sí que percibe un aumento de huéspedes.

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