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El coste del combustible en pleno ecuador del verano

El gasóleo baja hasta ocho céntimos en un año y llenar el depósito cuesta unos 62 euros

Son casi dos euros menos que en el puente de agosto de 2018 -La gasolina, sin embargo, solo experimenta bajadas en 7 de las 19 estaciones -En ambos casos, están hasta 17 céntimos por debajo de la media europea

La operación salida de vacaciones de agosto y la de Semana Santa concentran, sin lugar a dudas, los mayores desplazamientos de tráfico de todo el año. En el caso de agosto, el uso del coche para disfrutar de las vacaciones se dispara primero el día 1, y después en estos días, en las jornadas inmediatas al puente festivo de la Asunción. Así que es normal que durante el ecuador del verano el precio del carburante se encarezca. Así lo confirma el Boletín Petrolero de la Unión Europea, donde apunta que tanto el gasóleo como la gasolina están subiendo desde las cuatro últimas semanas.

Sin embargo, los precios que ahora muestran las estaciones de servicio están por debajo de los que tenían el año pasado también en vísperas del 15 de agosto. Según los datos de la web de Geoportal, donde aparecen 19 gasolineras de Deza (falta la de la cooperativa O Rodo, que debe incluirla Fomento), el gasóleo A se mueve en unas horquillas de 1,149 euros por litro en la estación de servicio de A Bandeira y los 1,249 de la estación que tiene Cepsa en Vilatuxe. Para darnos una idea, el abanico de precios del año pasado por estas mismas fechas era de 1,179 euros (en la gasolinera de Cobideza en Silleda) y 1,279 en las dos de Repsol en la Rúa Corredoira y Rúa do Río, en Lalín.

Así es que, si el año pasado llenar un tanque de 50 litros de gasóleo costaba entre 58,45 y 63,95 euros, en función de la gasolinera, ahora sale un poco más barato, entre los 57,45 y los 62,45 euros. El descenso en el precio del diésel se da en todas las gasolineras de la comarca, con bajadas de entre uno y siete céntimos por litro.

Según el citado boletín, el precio medio del gasóleo en España está en los 1,216 euros por litro, una cifra que superan algunas estaciones de la comarca como las tres de Repsol del casco urbano, la de Vilatuxe o el área de servicio de la AP-53. Sin embargo, la veintena de estaciones dezanas sí está por debajo de la media europea, a 1,329 euros el litro de gasóleo.

Sin embargo, en gasolina los descensos se producen en contadas estaciones. Los datos de ayer (solo Aira y Cobideza tenían, como datos más recientes, los del lunes día 5) indican que los precios de la gasolina de 95 octanos oscilan entre los 1,259 euros de la mencionada cooperativa Aira, seguidos por los 1,269 de A Bandeira y los 1,349 que cuesta cada litro en Vilatuxe o en la estación de la autopista. Las estaciones donde la gasolina está ahora más barata que hace un año son la de Shell en Agolada y la estación de servicio de Camanzo, donde el litro de carburante cuesta un céntimo menos que hace un año; la de Cobideza, con un descenso de dos céntimos; la de Cepsa en la entrada del casco urbano de Silleda en dirección a Santiago, con un recorte de cuatro céntimos, y las de A Bandeira y la autopista, con sendas bajadas de cinco céntimos. Staroil, que funciona en el polígono Lalín 2000, reduce su precio en 0,1 céntimos en comparación con el año pasado.

De este modo, un tanque de 50 litros de gasolina cuesta entre 63,45 y 67,50 euros. Puede haber un ahorro de hasta dos euros, en función de la gasolinera, porque en el puente del año pasado costaba entre los 64,45 y los 69,95 euros. Es más difícil echar cuentas a la hora de repostar gasolina, puesto que los precios están igual que el año pasado en cinco estaciones (la del casco urbano de Agolada, la de Dozón, la del Carrefour en Lalín, la de Galp en la N-525 y la de Petronor en Gres. En el resto, sube de uno a dos céntimos por litro.

En cualquier caso, el precio de la gasolina de 95 octanos en líneas generales sigue por debajo de la media española, a 1,331 euros por litro. Solo hay tres gasolineras que ayer rebasaban esta cotización. Eso sí, la veintena que operan en la comarca vuelven a quedarse por debajo de los 1,439 euros que cuesta la gasolina, de media, en la UE

Como siempre, el tráfico que soporta la vía donde se ubica la gasolinera motiva que su carburante sea más o menos caro, dentro de la misma compañía. Esto explica que Repsol, en Agolada, venda su carburante a dos céntimos menos que en el casco de Lalín, o que Galp suba entre 4 y 5 céntimos sus combustibles de la AP-53 en comparación con la gasolinera de la N-525.

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