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Las 100 pesetas con las que llegó el low cost

El mítico Todo a 100 cumple 28 años y compite con la venta online y bazares orientales

Francisco José López en el Flop Super 100 // Bernabé/ Cris M.V.

En la década de los noventa, concretamente en 1991, A Estrada vio nacer uno de los comercios de artículos low cost más míticos y con más historia del municipio. Terminaría contando con clientes de todas las familias y ahora, a escasos dos años de cumplir la treintena, forma o ha formado parte de la historia de muchos vecinos estradenses.

La fundación de este negocio en A Estrada tuvo su razón en una especie de carrera comercial de establecimientos low cost. Francisco José López, se vio atraído por este tipo de negocio a raíz de algunas de sus amistades que regentaban tiendas de estas características en otros puntos de la geografía gallega. "Era el negocio de moda", recuerda sobre los orígenes el fundador de Flop Super 100. Ahora cumple 28 años. Para celebrar el aniversario el establecimiento aplicará el 20% de descuento en todos sus productos durante algo más de un mes.

En el florecer estradense del formato "Todo a 100", Francisco José López explica que los comercios tradicionales, que tenían unos precios superiores a los de su negocio, tuvieron una relación de simbiosis con el auge del low cost. Asegura que ningún comercio perdía clientes en detrimento del otro. "Cada uno tenía su clientela", sostiene.

Si en los 90 era el negocio de actualidad y el único de su estilo en A Estrada, con el paso del tiempo se sucedieron otros formatos similares de éxito, en los que la diversidad del surtido y el bajo precio son tarjeta de visita. Las pesetas dieron paso a los euros. Sin embargo, el nombre del establecimiento resistió. Los otrora famosos Todo a 100 comenzaron a tener competencia -mucha representada por los bazares orientales- y la clientela de los "low cost" se fraccionó.

Sin embargo, mientras que unos establecimientos abrían, se reubicaban o cerraban sus puertas, el comercio de Francisco José López siempre se mantuvo en el mismo lugar, situado en las galerías que llevan su nombre -Galerías Flop Super 100- por la gran superficie que ocupa en ellas.

Aunque el verdadero competidor de Francisco José López no se encuentra en el municipio. El dueño comenta que el mayor reto para la firma, más allá de formatos de venta similares al Todo a 100, llegó con las nuevas tecnologías. Este reciente desafío es internet y las ventas online a través de exitosas plataformas.

Asimismo, este comerciante estradense explica que el cambio producido con la llegada de las compras por internet y el éxito de los bazares orientales en la villa no solo ha provocado una menor afluencia de clientes, sino también un cambio de su perfil. "Ahora son de mediana edad y antes había críos", comenta Francisco José López sobre los niños que acompañaban a sus familias a la tienda. Además, este hecho provocó que dejase las "chuches". Lo recuerda al observar el mostrador que le dedicaba a las gominolas para endulzar la compra de los más pequeños.

El propietario se muestra optimista y espera que la tienda continúe a pleno rendimiento y con resultados favorables durante muchos años más. Aun así, más allá del éxito futuro que pueda recabar, siempre estará en el mural de honor de los comercios locales. Y con 28 años a sus cuestas, Flop Super 100, el Todo a 100 estradense por antonomasia y primer establecimiento low cost del municipio, posiblemente estará durante muchos años en la memoria de las familias de la localidad.

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