Los salarios de Alcaldes y concejales de los grupos de gobierno de los nueve municipios de Deza y Tabeirós-Montes supondrán cada año más de 882.000 euros, una cuantía que aumenta en 120.000 euros respecto al mandato anterior y teniendo en cuenta que en la anterior constitución de las corporaciones locales, en 2015, Cerdedo y Cotobade funcionaban como administraciones independientes; es decir, ahora hay un concello menos que cuatro años atrás. Este incremento se debe, en gran medida, a que ahora habrá hasta 26 concejales cuyo sueldo saldrá de los presupuestos municipales de cada ayuntamiento, y en el mandato 2015-2019 eran exactamente 18.
En términos absolutos el ejecutivo lalinense, presidido por José Crespo es el que más incrementa los recursos dedicados a pagar a los representantes de su gobierno, pues el montante crece en 73.700 euros. No obstante, si nos centramos en cuánto sube el gasto porcentualmente, el gobierno agoladés de Luis Calvo lo incrementa en un 67% respecto al de su antecesor, Ramiro Varela. Solo Vila de Cruces recorta los emolumentos totales de una manera llamativa, pues los casos de Dozón o Forcarei son prácticamente anecdóticos. El recorte del gobierno cruceño se debe a que su alcalde, Luis Taboada, será el único sin dedicación por desempeño del cargo.
| Lalín. Con el regreso al poder, José Crespo decidió mantener el salario que tenía dos mandatos antes y también los mismos 47.227 euros brutos que cobraba al año su antecesor, Rafael Cuíña, cuyo gobierno costaba a los vecinos 121.454 euros anuales. Además del regidor, cobraban del erario público los ediles Nicolás González Casares (46.227 euros al año) y Miguel Medela (28.000). Ahora, además del alcalde, tendrán sueldo Paz Pérez (46.227), Begoña Blanco (37.227) -la misma cuantía que César Reboredo- y a José Cuñarro le fueron asignados 27.227 euros. Crespo, muy criticado por la oposición por esta decisión, aseguró que un concello de la dimensión de Lalín precisa un número razonable de concejales con dedicación y que no volvería a cometer el error de llevar la gestión con un edil en nómina además de él. Las arremetidas de la oposición se centraban sobre todo en la contratación de dos asesores para concejalías.
| Silleda. Manuel Cuíña afronta su segundo mandato con mayoría absoluta y por primera vez con el tope salarial permitido por ley para un concello de esta categoría. Así, el mandatario ganará 5.500 euros brutos más al año y percibirá un total de 47.759 euros. Además, de las tres concejales con sueldo, ahora hay uno a mayores. El montante económico respecto al anterior mandato sube en 35.154 euros y alcanzará los 143.275 anuales. Las retribuciones de los ediles delegados es la siguiente: Mónica González (28.000), Ángela Troitiño (23.999), Klaus Brey (19.518) y Pilar Peón percibirá 23.999 euros. En todos los casos, las cuantías de los salarios de los cargos públicos son en bruto, anuales, y a percibir en 14 pagas.
| Vila de Cruces. Uno de los concellos donde hubo cambio de gobierno, su nuevo mandatario, Luis Taboada, no cobrará. Su antecesor, Jesús Otero, percibía 44.623 euros anuales. Pero esta cuantía, aún manteniendo las tres dedicaciones para ediles del gobierno, no es exactamente la que baja respecto al mandato anterior. Porque los concejales de Xuntos Mireya Otero y Julio López se repartirán 27.600 y 24.500 euros respectivamente. La socialista Carmen Silva ingresará también 24.500 euros. Las rentas, en el mandato anterior, de Beatriz Iglesias, Andrés Lareu y Manuel Souto totalizaban 56.314 euros, mientras que ahora las nóminas del mismo número de cargos se va hasta los 76.600.
| Rodeiro. Estamos ante el único gobierno en el que la diferencia salarial de sus representantes en comparación con el mandato anterior es igual a cero. Luis López conserva, como alcalde, una nómina de 34.216 euros anuales y Cati Somoza y Rubén Quintá, 11.200 cada uno.
| Agolada. Otro de los ayuntamientos con cambio de gobierno y, en este caso, será más caro para sus representados. Luis Calvo se asignó una retribución de 24.976 euros anuales, bastante por debajo de los 39.494 de Ramiro Varela. Pero si entre 2015 y 2019 el ejecutivo popular no tenía ediles con sueldo, ahora serán cuatro. Entre todos se repartirán prácticamente 41.000 euros anuales.
| Dozón. Su alcalde, Adolfo Campos, ingresará anualmente 714 euros brutos menos tras asignarse una nómina de 39.276 euros por una relación laboral de 30 horas semanales. Y cuatro ediles del gobierno mantienen unos salarios de 250 euros mensuales.
| A Estrada. José López fue otro de los alcaldes que tiró de normativa para asignarse el sueldo máximo permitido por ley y de los 55.000 euros anuales pasará a percibir 58.372. En lo que respecta a las dedicaciones, se mantienen en cuatro y con las mismas cuantías. Juan Constenla recibirá 40.000 euros, Amalia Goldar (30.000) y 20.000 cada uno Gonzalo Louzao y Alberto Blanco. El coste del gobierno se sitúa en 168.372 euros al año; casi 27.000 menos que el de Lalín.
| Forcarei. La socialista Verónica Pichel se estrena en la Alcaldía con una retribución de 40.400 euros, frente a los casi 41.000 de Belén Cachafeiro. Es, tanto antes como ahora, la única dedicación.
| Cerdedo-Cotobade. Es la primera corporación salida de las urnas tras la fusión, en 2016, de estos dos ayuntamientos Antes, el mandatario de Cotobade y actual regidor, Jorge Cubela, tenía un sueldo de 35.000 euros al año, 5.000 menos que el exregidor cerdedense José Balseiros. Ahora Cubela pasará a disponer de 42.000 euros y la concejala Lourdes Ovelleiro de otros 40.000.
