La alcaldesa de Forcarei, Verónica Pichel, supervisó con la empresa adjudicataria las obras del nuevo gimnasio municipal, una actuación financiada a través del Plan de Reequilibrio y Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra. La dirigente forcaricense quiso realizar esta visita para comprobar cómo se desarrolla una obra que el Concello recibirá en las próximas semanas y que, según se explicó, está en estos momentos con los últimos retoques.

La actuación fue adjudicada a la firma Taboada y Ramos por un importe de 351.000 euros, presentando una baja de 49.000 sobre la inversión inicialmente prevista. El pasado mes de mayo se procedió a la realización de un modificado, incrementando el proyecto en 37.000 euros. A Estas cifras habrá que sumar ahora -indican desde el Concello- un nuevo incremento en la liquidación final al objeto de garantizar que el edificio sea accesible y sostenible.

El proyecto inicial fue variado, de manera que se prescindió d la planta del sótano en la que, en origen, iban a situarse el vestíbulo y la zona de almacén. Hubo también que solventar algunas deficiencias "de la redacción del proyecto" en materia de aislamientos, la zona de instalaciones, las canalizaciones exteriores o el cuadro eléctrico, según se recordó ayer.

El gobierno que encabeza Pichel tendrá, tan pronto como la obra haya sido entregada, que abordar una nueva fase en esta actuación a través de la licitación de las máquinas y el mobiliario que se encargará de equipar estas instalaciones deportivas.