La calle Rosalía de Castro de Lalín podrá cerrarse al tráfico los fines de semana hasta finales de septiembre al haber respaldado el grupo de gobierno una demanda de hosteleros del tramo de esta vía conocido como la Rúa dos Viños. La decisión municipal parte de una solicitud presentada el pasado 9 de mayo por uno de los profesionales de la hostelería de esta rúa, en representación de más compañeros, demanda que fue refrendada en junta de gobierno local el día 13 del mismo mes.

La autorización, respaldada por unanimidad en este órgano del gobierno local, consiste en que la interrupción de la circulación comience a las 18.00 horas de los viernes y se mantenga de manera ininterrumpida hasta las madrugada del domingo al lunes. La medida tiene vigencia, desde la aprobación del acuerdo, hasta finales del mes de septiembre. Además, los hosteleros plantearon al Concello la necesidad de recuperar las jardineras en esta vía. Cabe recordar que el ayuntamiento había habilitado una estructura portátil con ruedas y engalanada a modo de advertencia a los conductores para impedir el acceso a Rosalía de Castro.

La propuesta apoyada por el ejecutivo municipal especifica que para facilitar la actividad de la Praza de Abastos, se abrirá un carril de entrada al aparcamiento de este recinto los sábados hasta las 13.00 horas; es decir, que se permitiría el acceso al citado parking gratuito del Campo da Feira en horario matinal, los sábados, y a partir de entonces la calle estaría totalmente cerrada al tráfico como los viernes desde las 18.00 horas o todo el domingo. En el mismo escrito también se pidió permiso al ayuntamiento para cortar la calle desde la tarde del pasado 16 de mayo hasta la madrugada del 18 por la coincidencia con un puente.

El grupo de gobierno, que esta mañana cesará oficialmente, tomó la decisión de cortar Rosalía de Castro los fines de semana a petición de los hosteleros para favorecer su actividad y, de hecho, casi dejó en sus manos la decisión de cuando se abría o no, pues en pleno invierno y con frío o lluvia las terrazas en la calle tenían poco sentido. Es algo que no ocultó el ejecutivo municipal, que siempre dijo que podrían ser los establecimientos de hostelería de esta zona los que pidiesen el corte de la vía en función de su actividad. Lo habitual es que las mesas de las terrazas ocupasen parte de la calzada, básicamente, en primavera y verano, aunque en la solicitud municipal se reservan la posibilidad del cierre de la calle hasta finales de septiembre. En este sentido caben dos consideraciones, que muchas veces la meteorología del noveno mes del año es propia de pleno verano y que a finales de septiembre se celebran las fiestas patronales.

Medidas del nuevo gobierno

A las 12.00 de hoy toma posesión el nuevo ejecutivo municipal y el equipo de José Crespo deberá posicionarse, no solo sobre esta autorización que podría ser un asunto menor, sino, con el tiempo, exponer qué tipo de modelo de humanización de la trama urbana quiere. Una de las primeras medidas, según lo que se indicó en campaña, pasaría por quitar la valla que permite el cierre al tráfico de un tramo de Principal y Joaquín Loriga.