El Concello de Lalín inició ayer los trabajos de acondicionamiento y restauración de la estatua de Ramón María Aller Ulloa, que está situada en el parque lateral al lado de la iglesia, autoría de Francisco Asorey e inaugurada en 1960. Esta intervención, que estará finalizada en 15 días, se enmarca en el proyecto para recuperar y conservar tres de los elementos de mayor relevancia patrimonial, histórico y atractivo turístico del municipio. Se trata, además de esta estatua, del monumento a Loriga -cuyos trabajos ya remataron- y del crucero de Moneixas.

El edil en funciones de Obras, Francisco Vilariño, señala que los trabajos están siendo realizados por la empresa Artegal, especialista en este tipo de intervenciones, y se justifican por la urgente y manifiesta necesidad de reparar unos monumentos que actualmente se encuentran en mal estado debido al paso del tiempo y que es necesario recuperar al tratarse de obras artísticas de gran valor y muy importantes para la villa y para sus visitantes.

El monumento a Aller, se encuentra en una situación de conservación similar a lo que estaba la estatua de Loriga, con presencia de líquenes y suciedad provocada por la colonización biológica del granito que lo conforma. También hay suciedad provocada por excrementos de aves y se observa una capa de suciedad provocada por la humedad y la polución atmosférica. A los tres proyectos citados se destinaron 40.000 euros.