El Centro de Acollida e Protección de Animais (CAAN), el servicio que ofrece la Diputación a 48 municipios de la provincia, recogió durante el año pasado 366 perros abandonados o perdidos en las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes.

Por municipios, es muy significativa la cifra de animales de los tres ayuntamientos más grandes. En la cabecera dezana, Lalín, los laceros del CAAN retiraron 107 perros (es decir, casi un tercio del total), mientras que de A Estrada procedían otros 83. Si queremos ver una media de cuántos animales abandonados recogieron por mes, resulta que en Lalín son un promedio de 8,9 perros, y en A Estrada, de 6,9. Desde Silleda se trasladaron 50 perros sin dueño (una media de 4,1 al mes), una cifra apenas superior a los 45 del concello vecino de Vila de Cruces (3,7 al mes). En Terra de Montes, el CAAN retiró durante el año pasado 36 perros abandonados en Forcarei (3 al mes), mientras que en Agolada fueron 25 (2,08), y tanto en Rodeiro como en Cerdedo-Cotobade, 9 (0,7 al mes). Cierra la lista Dozón, donde el CAAN retiró a dos perros (0,1 por mes).

Resulta curioso que en Cerdedo-Cotobade, en lo que va de año, ya se recogieron 12 animales, es decir, más que en todo 2018. Según indica el propio servicio, desde enero en las dos comarcas el CAAN atendió a 102 animales, por debajo de los 128 que contabilizaba a estas alturas en 2018. Así, el volumen de recogida bajó en un 24%, pese a ese aumento en Cerdedo-Cotobade. Veamos el resto del municipios. En Deza, en estos cinco meses el CAAN trasladó a su sede de A Armenteira, en Meis, a 26 perros hallados en Lalín, a los que se suman 19 de Silleda, 12 de Vila de Cruces y uno tanto en Rodeiro como Agolada y Dozón. En la comarca vecina, se detectaron 23 perros abandonados en A Estrada y otros 7 en Forcarei.

Los animales recogidos son trasladados a Meis, donde sus veterinarios. Si no aparece su dueño, el animal pasa a ser considerado como abandonado y entra en las campañas de adopción. A día de hoy, en la web de CAAN figuran fotos y detalles de 45 perros en adopción en las comarcas. Su nuevo dueño lo recibirá de forma gratuita, vacunado, desparasitado e identificado con microchip.