Compromiso por Lalín presentó ayer varias propuestas que contempla en su programa electoral, y lo hizo en la rúa Rosalía de Castro, conocida como la Rúa dos Viños. Acompañado por varios miembros de su lista, el candidato a revalidar la Alcaldía, Rafael Cuíña, desgranó un "proyecto muy ambicioso" que, con una inversión de 320.000 euros, transformará esta calle en un bulevar. El documento que preparó un arquitecto local contempla para Rosalía de Castro un firme uniforme y en piedra, de modo que van a eliminarse los salientes que luce en la actualidad. Para favorecer la accesibilidad a personas con movilidad reducida o diversidad funcional, el suelo tendrá señalización podotáctiles. Son elementos de unos tres milímetros de altura, de textura diferente al resto del firme porque así alertan, por ejemplo, de la proximidad de un paso de peatones.

Parte de la calle tendrá cubrición textil que sirve para proteger tanto de la lluvia como de los rayos ultravioleta, lo que permitirá emplear aún más las terrazas a lo largo del año en una zona que se ha transformado en centro de encuentro de familias sobre todo los fines de semana, cuando quedan cerradas al tráfico varias calles del centro. Una iniciativa que puso en marcha el gobierno cuatripartito de Cuíña y cuyas bondades fueron reconocidas incluso por concejales del PP, como indicó el propio alcalde. El proyecto está consensuado con buena parte de los hoteleros de la zona, que así podrán desarrollar mejor sus actividades e incluso podrían crear una asociación. Se completa con iluminación LED horizontal autocargable y más árboles.

La reforma de esta rúa, además de ser una demanda de hace tiempo, es necesaria una vez que se visita la remodelada Praza de Abastos. Y quedará completada con la compra del Cine Balado, cifrado en 300.000 euros. El inmueble albergará tanto un mini-teatro como un espacio destinado a los peregrinos que usan las dos rutas jacobeas que confluyen en Lalín y que, además, dispondrán de un albergue en solar del antiguo colegio Manuel Rivero. Cuíña anuncia, además, la potenciación de la Vía da Prata y del Camiño de Inverno con el plan Lalín, encrucillada de camiños. Durante los meses de verano, "queremos institucionalizar el llamado Festival do Camiño". Habrá, además, actuaciones musicales todos los años. Todo ello forma parte de lo que Cuíña denomina la "revolución del turismo en Lalín".