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Las rentas públicas y sociales en Deza y Tabeirós

Los perceptores de pensiones no contributivas en las comarcas descienden un 40% en diez años

Son 1.345 jubilados que perciben subsidios pese a no haber cotizado -La mayor parte corresponden a rentas por jubilación, pero también hay más de 400 casos de invalidez -Lalín es el municipio con más beneficiarios

Seminario para personas en riesgo de exclusión social en Lalín.

El sistema público garantiza a aquellas personas que no han aportado con sus rentas durante su vida laboral unas prestaciones, son las denominadas pensiones no contributivas. Son ingresos mensuales a los que pueden acceder tanto los ciudadanos a los que les haya llegado su etapa de jubilación por edad como aquellos que padezcan algún tipo de invalidez.

Estas prestaciones se Son prestaciones económicas que se reconocen a aquellos ciudadanos que se encuentren en una situación de necesidad, carezcan de recursos suficientes para su subsistencia en los términos legalmente establecidos, no hubieran cotizado nunca o no lo hubieran hecho durante el tiempo suficiente para alcanzar las pensiones contributivas. En el caso de los beneficiarios de pensiones por jubilación, los varemos del pasado año establecían transferencias de un mínimo de 92,48 euros y un máximo de 369,90 euros por 14 mensualidades al año. Para los afectados por invalidez, las rentas oscilaban entre los 92,48 euros y los 369,90 euros, también en 14 mensualidades.

Pues bien, en las comarcas, según los últimos datos divulgados por la Xunta -referidos al año 2017- figuran un total de 1.345 personas perceptoras de pensiones no contributivas. Este dato supone un descenso de algo más del 40% respecto a diez años atrás, cuando en los nueve municipios de Deza y Tabeirós-Montes se contabilizaban 1.908 casos. Como es habitual en estos casos, el mayor porcentaje de ciudadanos que accedió a estas rentas son jubilados, que representan más de la mitad de los pensionistas a los que les fue reconocida una invalidez. En este caso de los 1.345 casos totales, los jubilados alcanzan los 913, mientras que los restantes beneficiarios, 432, lo son por invalidez.

Lalín, pese a que su censo poblacional es sensiblemente inferior al de A Estrada es, sin embargo, el ayuntamiento de las dos comarcas que más beneficiarios de rentas no contributivas tiene. Son, en concreto, 406. De ellos, 291 son jubilados. Este dato es inferior en 88 casos respecto a 2007, cuando la capital dezana contabilizaba 494.

La cabecera comarcal de Tabeirós experimentó un mayor descenso todavía, al sumar ahora 335 pensionistas, frente a los 480 de diez años atrás. Del último censo divulgado, 125 son personas con una invalidez y los otros 210, jubilados.

Casi medio centenar menos de trasdezanos son usuarios de estas rentas que hace una década, cuanto en este territorio se contabilizaban 159. Ahora son 110, de los que 82 cobran estas prestaciones económicas al haber llegado su momento de jubilarse. Un descenso todavía más llamativo se da en Vila de Cruces, que pasó de aglutinar a 213 vecinos perceptores de pensiones no contributivas a los 130 que aparecen en el último censo. Como en los demás casos, los jubilados duplican a los que disponen mensualmente de estos ingresos por padecer alguna clase de incapacidad.

Rodeiro y Agolada, dos municipios en los que su radiografía poblacional es muy semejante, muestran sin embargo escenarios muy diferentes. En el primer caso son 67 los beneficiarios tras haber descendido este censo oficial en 62 casos en diez años. En la localidad agoladesa, donde este registro también disminuye, lo hace en términos porcentuales y generales mucho menores al mantener a 112 pensionistas, frente a los 169 contabilizados 120 meses antes. En Dozón son 24 (13 menos) y en este caso el censo de rentistas por invalidez y jubilación es mucho más parejo, con 10 y 14 casos respectivamente.

En Forcarei hay 51 perceptores de pensiones no contributivas, 24 menos. Y en Cerdedo-Cotobade ahora son 110, mientras que diez años antes, cuando cada uno de los dos concellos fusionados operaba de manera independiente el registro apuntaba a un total de 152. Es decir, en este período el volumen de pensionistas se recortó en 42 casos.

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