El escultor Cándido Pazos es un embajador con mayúsculas del Camino de Santiago. Lo demuestra su modo de convertir en arte múltiples aspectos de las sendas jacobeas. Comprometido ahora con la puesta en valor del itinerario cultural a Santiago desde Braga -un recorrido que atraviesa A Estrada-, el compostelano de nacimiento y estradense de adopción buscó ayer la implicación del triatleta Iván Raña en el impulso a un camino para el que se tramita su proclamación como Itinerario de Interés Cultural. A mayores, Cándido tuvo ocasión de presentar al deportista las nuevas medallas que ha ideado y que se pondrán a la venta el próximo 10 de abril en la capital compostelana.
Pazos se reunió con Raña en el Hostal dos Reis Católicos un encuentro al que también asistió el presidente de los Clubes Financieros de Santiago, A Coruña y Vigo, Roberto Pereira. Tras el encuentro, el escultor indicó que el triatleta acogió con gusto la iniciativa y brindó su colaboración al impulso a una ruta que, a la vez que espiritual, tiene una importante vertiente cultural, gastronómica y deportiva. En este último punto, Cándido Pazos incidió en que es un recorrido a Compostela ideal para su realización sobre una bicicleta de montaña o a caballo, con un contacto directo con una sucesión de innumerables estampas paisajísticas.
En el marco de esta puesta en valor del camino a Santiago desde Braga -presenta una bifurcación desde la que parten la variante de Sarandón y la que, desde Forcarei, cruza Codeseda y avanza hacia la Ciudad del Apóstol atravesando Pontevea- el artista ideó una escultura de un peregrino para situar en A Estrada. La obra medirá más de dos metros de altura. Llevará una base en granito en la que Pazos grabará -con policromía en rojo viejo para conferir un mayor realce- los principales nombres de este itinerario cultural entre Braga y Santiago, al que él se refiere como Camino Jacobeo Ribeiro-Ulla. El cuerpo principal de la escultura, bautizada de inicio como Camino portugués del peregrino, descansa sobre serpentina con jade, un material por el que este escultor confiesa una especial predilección. El peregrino lo elaboró en bronce.
En cuanto a las nuevas medallas ideadas por este polifacético creador, incorporan un dibujo de la catedral de Santiago vista desde la alameda compostelana, una hermosa estampa realizada y firmada por el propio Pazos. Debajo puede leerse "Meta del Camino de Santiago". En la parte posterior, la medalla incorpora una vieira en relieve entre un mar de algas. Explicó el artista que no colocó laureles "para que no sea una medalla deportiva". "No es un premio deportivo. Es un recuerdo al esfuerzo que supone la meta", explicó. "El premio es el haber llegado", incidió el autor. Explicó que la pretensión es que las personas que realicen el Camino puedan regresar a sus casas sumando esta pieza a los muchos recuerdos que habrán atesorado durante esta experiencia única.
