Las quejas de los vecinos y negocios de Praza da Vila dieron, por fin, su fruto y el Concello desplazó ayer por la mañana a la zona a una operaria para que retirase la hojarasca acumulada bajo los árboles. La trabajadora rematará hoy su tarea de puesta a punto del enclave, que suele ser una zona de paso a Praza da Igrexa y la Avenida Luis González Taboada. Aunque está enclavada en el centro del casco urbano, la Praza da Vila protagonizó desde hace años críticas de los residentes no solo por la falta de civismo de algunos dueños de perros (no recogen sus excrementos) sino también por la escasa frecuencia con la que se barren restos, hojas de árboles y otra vegetación que cae sobre las zonas verdes y las aceras. Los vecinos quieren agradecer la labor de esta trabajadora.