Las comarcas de Deza y Tabeirós-Montes consiguieron, durante el año pasado, aumentar sus trabajadores en 528 casos pese a que hubo concellos que no mejoraron este balance. Agolada, Vila de Cruces, Rodeiro y Forcarei son los territorios que cerraron 2018 con menos cotizantes que un año antes. P

Pero en el análisis de los datos estadísticos oficiales aparecen sorpresas como casos de municipios que, todavía perdiendo afiliados en sus números absolutos, sí son capaces de ganar mano de obra extranjera. Este es el caso de Agolada, que cede 10 activos pero suma dos foráneos. Dozón, con 14 cotizantes más en doce meses, mantiene sus 3 contratados extranjeros. Lalín, el municipio con más mano de obra foránea, pasó en un año de 199 a 229 afiliados extranjeros y A Estrada sumó una veintena más de los 91 iniciales. Silleda, que en total gana 96 activos, reduce sin embargo de 191 a 188 sus trabajadores de otras nacionalidades. Vila de Cruces recorta dos sobre 27, Rodeiro gana uno a mayores de los 14 habidos en 2017 y Cerdedo-Cotobade suma 8 sobre 18. Forcarei, con 16 cotizantes menos, aumenta tres foráneos, hasta los 17.