Los dos jóvenes juzgados ayer forman parte de una investigación en la que inicialmente figuraban una quincena de personas. Seis de ellas vieron como la jueza decretaba el sobreseimiento provisional y archivo de su causa hace solo unos días. Se trata de cinco alumnos del centro escolar estradense y de una profesora de clases particulares. En su fallo la jueza consideraba que las diligencias practicadas "no evidencian que dichos investigados hubieran instalado el sistema software ni que hubieran efectuado entradas no consentidas en las cuentas de correo para la obtención de datos y su divulgación".

Hubo además otros cinco jóvenes investigados, aunque todos ellos eran menores de edad en el momento en el que se produjeron los hechos. Dos de ellos fueron investigados por la manipulación de los ordenadores y cinco de ellos por la distribución de la información obtenida con el hackeo. Este caso se lleva sin embargo de forma paralela, a través de la Fiscalía de Menores de Pontevedra. Las últimas informaciones en este sentido apuntan a que de todos ellos ya solo quedaría uno siendo investigado, mientras que la causa contra los otros cuatro habría quedado cerrada.