-Intentar compaginar el GES con el fitness y las pasarelas de moda es rizar el rizo demasiado, ¿no le parece?

-Desde luego fácil no es. Todo depende de cuándo te pongan el desfile. Suelen ser los fines de semana y si te coincide que lo tienes libre, perfecto. Lo de las pasarelas es un momento puntual, un par de horas durante un fin de semana. No es como lo otro que es día a día.

-¿Le gusta la moda?

-Me gusta vestir bien, lo reconozco. En general, la imagen para mí es algo muy importante tanto en el trabajo como en otros órdenes de la vida.

-¿Hay muchos modelos masculinos en el municipio?

-Aquí, en Lalín, hay un par de ellos. Unos se dedican más que otros porque depende del tiempo que tengan y de sus respectivos trabajos. En mi caso, supongo que cada vez me dedicaré menos a subir a las pasarelas porque tras conseguir el título me apetece compaginarlo más con mi trabajo. Eso sí, lo primero es el trabajo y como segunda profesión quiere tener la de instructor polivalente en sala fitness. Me imagino que me seguirán llamando para algún pase de moda, pero ya te digo que será en momentos muy puntuales.

-¿Nunca le tentó la interpretación o la pequeña pantalla?

-El cine es muy complicado, pero sí que me hubiera gustado probar en la televisión. Lo que pasa es que no puedas abarcar tanto porque al final te centras mucho en algo y el resto lo dejas desatendido, y tampoco se trata de eso. Yo no puedo descuidar mi trabajo porque el mío no es como el de un carpintero, que trabajas tus horas, te vas y desconectas. En el GES tienes que estar siempre disponible porque puede suceder un siniestro muy grande y hacer falta todo el personal. Por eso tampoco se trata de estar a mil cosas a la vez. De todas formas, si saliera algo en la tele no les diría que no.