"Pero si tenemos la obra parada en la zona de incorporación de tierras a la espera del tratamiento de residuos". Sin querer entrar en la polémica suscitada en los últimos días por la gestión de residuos en la obra de reurbanización y ampliación de la alameda de A Estrada, el alcalde, José López Campos, no pudo ocultar ayer su sorpresa. El regidor ya había avanzado que el perfil de "obra de residuos cero" por el que se apostó en esta actuación mantenía el avance de los trabajos a la espera de que llegase una máquina destinada a triturar el material resultante de las demoliciones en la Praza da Constitución, a fin de reutilizarlo en los pavimentos duros que se contemplan en el nuevo parque y en la propia plaza. El dirigente local garantizó ayer que no se enterraron residuos y avanzó que, a raíz de la autorización solicitada el 14 de enero para el tratamiento de los restos de construcción y demolición de esta obra se fijó como plazo para el oportuno tratamiento el período comprendido entre los días 5 y 8 de febrero.
Después de que la Asociación Profesional de Recicladores de Residuos de Construcción y Demolición de Galicia (Arcodega) denunciase ante la Xunta la gestión de residuos en la alameda estradense, en la mañana de ayer el alcalde, acompañado por otros representantes de la administración municipal, tuvo ocasión de reunirse con un inspector de Medio Ambiente que se trasladó hasta A Estrada. Tras ofrecerle todas las explicaciones e informaciones correspondientes, el munícipe dijo que le invitó a regresar hoy mismo para visitar toda la obra. "Lo que queremos es que se venga a ver", apuntó López, que hizo extensiva esta invitación a Arcodega. Defendió el mandatario que lo que se busca es que esta actuación se convierta "en un referente en materia medioambiental" y en ejemplo de una gestión sostenible de los residuos.
José López incidió en que el tratamiento de residuos por el que se apostó en esta obra se acomoda a la tendencia, dijo, que está impulsando la administración gallega, tratando de afrontar obras "con residuo cero para minimizar el impacto medioambiental". Explicó que se valorizan todos los residuos generados, tratando de apostar por la reincorporación a la propia obra siempre que sea posible.
"No se enterró nada", remarcó el alcalde. "Los residuos están ahí". El regidor aprovechó la ocasión para remarcar que se está trabajando "en una cota inferior a la que había antes" . "¿Cómo se iban a enterrar?", cuestionó. Incidió en que todos los residuos fueron acopiados en la zona de ampliación de la alameda a la espera de que arranque el tratamiento en los próximos días. Apuntó que, lo que pudo interpretarse mal, puede ser que en la zona de Iryda, en un entorno en el que hay restos de la obra, se emplea provisionalmente para facilitar la entrada de los camiones a la parcela, buscando que no tengan que acceder por la carretera nacional. No obstante, subrayó que "no se incorporó nada al terreno". "Todos los residuos están acopiados pero no incorporados al terreno", insistió.
En este punto, el alcalde de A Estrada recordó la obra podría haber continuado con la pavimentación y construcción de las nuevas plazas proyectadas para los jardines municipales. Sin embargo, esta actuación está pendiente de que una máquina acuda para, una vez valorizados los residuos, triturar el material que puede ser reutilizado para las zonas duras del nuevo parque. En mandatario señaló que el tratamiento de estos inertes esta programado en los días indicados. Recalcó que se trata de una empresa homologada en la gestión de residuos y con una planta móvil que permitirá reducir los costes de traslado, gestionando este material in situ. "Ahí se separan los residuos valorizables de los que no lo son", remarcó.
El jefe del ejecutivo estradense aportó el informe que se acompañó a la petición de autorización para la gestión de estos residuos. En él se indica que la empresa homologada en esta materia trasladará su machacadora para que se puedan triturar los residuos e construcción y demolición que posee la obra de reurbanización y ampliación de la alameda. "Los materiales son restos de hormigón y mezclas de escombro limpios", se incluye en este documento, en el que se constata que la fecha prevista para el comienzo de la actividad será el martes 5 de febrero, calculando que los trabajos queden concluidos el día 8 del próximo mes. Asimismo, se aporta que la cantidad estimada que se triturará será de alrededor de 500 toneladas de material.
Como medidas correctoras y protectoras, la memoria detalla que, en el caso de que se observen emisiones a la atmósfera en polvo, "se incorporará de manera inmediata el riego por aspersión de la machacadora, evitándose cualquier molestia o perturbación por polvo o partículas en suspensión".
La máquina se colocará sobre una superficie de hormigón dentro de obra, "por lo que no hay posible afección al suelo. Tras apuntar que "no existen posibles afecciones a la flora ni a la fauna" ya que la actuación se realizará en el propio recinto de obra, se indica que el material que pueda surgir, caso de plásticos, papeles, metales o madera, "serán llevados a un gestor autorizado". El material resultante del "machaqueo" será empleado por Copcisa dentro de la obra.
