El sábado buena parte del país se levantará con el soniquete de San Ildefonso. Ángeles Bahamonde madrugará para seguir, al pie del cañón desde la Administración de Loterías Número 1 de A Estrada, el hipnótico girar de los bombos que decidirán qué números habrán de llenar de alegría muchos hogares. Hace 37 años que esta administración tiene sus puertas abiertas en la capital de Tabeirós y, desde aquel 1981, el Sorteo Extraordinario de Navidad se vive como uno de los días más especiales del año. El negocio que ahora dirige Bahamonde tiene sus propios números estrella, aquellos que espera desde hace casi cuatro décadas ver salir del bombo para repartir suerte a todos los estradenses.
Quienes confían en una compra de última hora para encontrar la fortuna hacen cola estos días ante las administraciones de lotería. Ángeles Bahamonde explica que en verano hubo un importante tirón de ventas de lotería de Navidad, ya que muchos de los que pasaron en A Estrada unos días de vacaciones no quisieron marcharse sin un décimo en la maleta. Añade que ahora, en este último mes, la gente ha vuelto a volcarse con la compra de estos boletos, esperando que el 22 de diciembre de 2018 sea el día en que la suerte les muestre una sonrisa de oreja a oreja.
No obstante, esta lotera estradense reconoce que no todo el mundo quiere esperar a última hora para hacerse con un décimo para este sorteo tan tradicional. "Hay gente que prefiere escoger el número", apunta. Y es que algunas de las combinaciones tradicionales que se despachan desde esta administración ya se agotaron hace meses. Es el caso del 25.148, un número que se distribuye desde este punto de venta de A Estrada desde hace 30 años y que venden establecimientos como el céntrico Bar Andalucía. Indican que salió premiado de forma consecutiva en los dos últimos años, de tal manera que son muchos los que confían en que esta Navidad a la tercera vaya la vencida y brinde el Gordo.
Otro número con tradición en A Estrada es el 20.298, vendiéndose en esta casa desde hace tres décadas, junto con el 29.153 y otras combinaciones en las que esta administración siempre ha confiado para repartir suerte en estas fechas. A modo de curiosidad, el Concello de A Estrada confía este año en el 72.170 y la ACOE juega por vez primera -y con voluntad de permanencia- el 98.747.
Aunque muchos aseguran que los nubarrones de la crisis económica no se han despejado, desde este sector se reconoce que la gente comienza a comprar ahora más cantidad de lotería que en los momentos más crudos de la recesión, de manera que en este campo sí se ven brotes verdes. Ángeles Bahamonde indica que sí se produjo un incremento en las ventas con respecto a años anteriores y, aunque todavía es pronto para saber si en este 2018 se juega más que en 2017, apuntó que este año la venta de lotería va "a un ritmo muy bueno". Bahamonde indicó que es difícil calcular cuánto se gastan los estradenses en conjurar la fortuna para el 22 de diciembre. Apuntó que los hay que se llevan solo un décimo y quienes compran una cantidad muy importante de ellos para distribuir en el seno empresarial, caso de una firma holandesa, entre otros.
