Vila de Cruces duplicará el presupuesto que destina a la Escuela Municipal de Música, ya que si en la actualidad cuenta con unos 50.000 euros, en los presupuestos del año que viene estará dotado con alrededor de 110.000, según apuntó ayer el alcalde, Jesús Otero. Este servicio, al igual que la escuela deportiva, funciona pero con una prórroga que ya dura cuatro años, y que ya ha despertado en más de una ocasión las críticas de los dos partidos de la oposición. La intención del gobierno cruceño es aprobar los presupuesto del año que viene en, como muy tarde, la última semana del presente mes.

Desde el PSOE, su portavoz Xurxo Guzmán apunta que la escuela municipal de música sí funciona y sí imparte clases, "pero gracias a que el profesorado, en su mayoría es de aquí". Añade que suelen cobrar cada dos ó tres meses, por lo que urge una licitación que regule esta situación y que, además, dote a la escuela de la figura de un director. En este sentido, Otero apunta que se puede optar por un director o por un coordinador.

En cuanto a la escuela deportiva, desde hace años funciona bajo las pautas del colectivo Discóbolo Galicia. En varios plenos, el PSOE reiteró la necesidad de sacar a concurso este servicio, porque en realidad "Discóbolo se limita a hacer labores de conserje, atendiendo las dotaciones del gimnasio o del campo de fútbol, ya que por ejemplo las clases de fútbol corren a cargo de la S.D. Cruces". En verano, su actividad docente sí va un poco más allá, "con aulas de piscina y natación". Guzmán recuerda, además, que Discóbolo está en realidad muy vinculado a la disciplina de lucha, que es a la que debería ceñirse. En cualquier caso, la oferta deportiva de Cruces se verá complementada en un futuro con la pista de pádel y el complejo deportivo y social Sergio Iglesias.