La ilusión, y en especial la de un niño, no entiende de estrecheces. Nada sabe del desempleo, de crisis económica o de las dificultades para llegar a fin de mes. Y nada ha de saber. Para que los niños de las familias con menos posibilidades económicas de A Estrada puedan disfrutar de la magia de la Navidad surgió la campaña solidaria Xoguetes por sorrisos. Con ella, los niños de distintos centros educativos de A Estrada hicieron posible la recogida de 500 juguetes que en las próximas semanas comenzarán a disfrutar los niños de 160 familias estradenses, aquellas a las que presta su ayuda con regularidad Cáritas Parroquial.

Una representación de los juguetes recogidos en los últimos días lució ayer sobre el escenario del Teatro Principal de A Estrada para bajar el telón de una campaña impulsada por el Concello y en la que participaron los colegios de O Foxo, Figueiroa, Oca, Cabada Vázquez, Pérez Viondi, N. S. Lourdes, la Escola Infantil Municipal y la nueva escuela infantil de A Galiña Azul. La iniciativa surgió a propósito del musical Naviland, que este domingo llega al Principal. Su organización planteó realizar una recogida solidaria de juguetes, aportando entradas para que puedan ser sorteadas entre los alumnos de los diferentes colegios que se hayan sumado a esta cadena solidaria.

El Concello de A Estrada se puso en contacto con Cáritas y con los centros del municipio para animarlos a sensibilizar al alumnado sobre la importancia de que compartan sus juguetes con niños menos afortunados. El director de la organización parroquial, José Manuel Vázquez, agradeció ayer públicamente el gesto y reconoció que la primera sonrisa surgió ayer mismo, al ver cómo un camión "de los de 1.200 kilos" llegó a la sede estradense de Cáritas "lleno hasta el techo de juguetes". Apuntó Vázquez que la distribución se pondrá en marcha de inmediato, favoreciendo que los niños puedan jugar durante todas sus vacaciones navideñas con estos regalos.

Desde Cáritas se indicó que en estos momentos, como queda avanzando, son 160 las familias a las que atiende, cada una de ellas con una media de "dos o tres niños", de manera que serán más de 300 los pequeños que vivan con toda la ilusión esta Navidad gracias a iniciativas como la que culminaba ayer.

En representación de los centros educativos que secundaron esta propuesta, la directora Rosa Ferreira (CEIP O Foxo), subrayó en la pasada jornada que iniciativas como esta ayudan a que el aprendizaje se salga del aula. Desde los centros se intentó que los niños fuesen conscientes de la importancia de compartir con aquellos que tienen menos medios pero idéntica ilusión. Prueba de que esta enseñanza caló hondo fueron las jornadas en las que los escolares llegaban a los centros con los juguetes llamados a despertar la perseguida sonrisa.