Galicia y Trasdeza lloran desde el pasado martes por la muerte de su vecina con más edad. La considerada "abuela" de Galicia, la silledense Concepción Pichel Sampayo, falleció en su domicilio de Vilar. Esta supercentenaria, nacida en un lejano 11 de mayo de 1908 en el lugar de Soutullo de la parroquia lalinense de Anseán, había soplado las 110 velas hace seis meses, acompañada de sus familiares y de su inseparable pandereta. Sus restos mortales fueron velados en el tanatorio O Deza, en la calle Carballeira do Chousiño de Silleda. El funeral por su eterno descanso tendrá lugar hoy a las 15.45 horas en la iglesia de Vilar, para su posterior inhumación en el cementerio de esta parroquia. El propio Concello de Silleda emitía ayer un comunicado de condolencia por quien "desde hace meses era la persona de más edad de Galicia". El pésame del consistorio incluye una declaración del propio alcalde, Manuel Cuíña, en la que indica que "su vitalidad, fuerza y alegría estarán para siempre en nuestro recuerdo".

Concepción Pichel era viuda de Rogelio García, con el que tuvo un total de siete hijos: Nélida, Fidelina, Pepe, Jesús, Manolo, Magín y Sofía. A pesar de que algunos de ellos residen lejos de su madre -Pepe, Manuel y Fidelina residen en Londres, y Jesús y Nélida en Carballo y en Montevideo, respectivamente- las celebraciones de los cumpleaños de su progenitora siempre estuvieron muy concurridas. No en vano, la familia cuenta con 22 miembros entre nueras, yernos, nietos y bisnietos. Para siempre quedan ya las sesiones musicales con la que la "abuela" de Galicia deleitaba a los que la iban a visitar. Concepción Pichel no dudaba ni un momento en tomar la pandereta y arrancarse a cantar. Soutullo regresaba de esta forma a su boca en las coplas, pero también sus tiempos de juventud en los que gozaba bailando. Pieza tras pieza donde no faltan ni siquiera los aturuxos. "Tenéis que bailar sino paro de cantar", animaba siempre a los que la acompañaban. "Siempre fui muy habladora, a mí me gustaba estar con la gente, hablar con los vecinos, nunca fui de quedarme encerrada en casa", dijo a FARO DE VIGO, aunque también reconocía que aquellas con las que más historias compartía, tanto sus vecinas, amigas o sus hermanas, se habían quedado ya por el camino hace años.

Municipio perenne

El fallecimiento de Concepción Pichel vuelve a poner de manifiesto que Trasdeza es un municipio con un gran nivel de perennidad. Lo cierto es que la nómina de personas centenarias, en concreto mujeres, nacidas en Silleda no pasa desapercibida. Además de la malograda Concepción Pichel, que celebró los 110 años el pasado 11 de mayo con el habitual ágape multitudinario en el Restaurante Coteliño, y de Ramona Costoyas, que cumplió los 109 el pasado mes de agosto, completa el curioso listado de vecinas que superan el siglo de vida Florentina Vidal Ferreiro, de la parroquia de Laro, que en septiembre alcanzó la friolera de los 101 años.

La clasificación silledense era todavía mayor hasta hace unos meses, en los que fallecieron otras dos vecinas, de 104 y 100 años, respectivamente. Resulta muy llamativo que todas las personas centenarias de Silleda son del sexo femenino sin que aparezca en la nómina ni un sólo varón que hubiera alcanzado esa cifra. El propio gobierno municipal señaló hace algún tiempo que tenía constancia de un gran número de vecinos de más de noventa años, que estarían a las puertas de cumplir el siglo de vida, lo que confirmaría la longevidad de los habitantes de este municipio.

La muerte de Concepción Pichel deja huérfana a una familia de Vilar, pero también a todos los que dentro y fuera de Silleda apreciaban la particular forma de afrontar la vida por parte de una mujer risueña y siempre dispuesta.