El cambio climático es ya una realidad desde hace años, y el mes que acaba de terminar no hace otra cosa que constatarlo: el mes de octubre no fue el inicio del otoño, sino una prolongación del verano con temperaturas que, en el caso de la estación meteorológica de Camanzo (Vila de Cruces), estuvieron hasta siete días por encima de los 25 grados. Según los datos que ofrece Meteogalicia, en esta estación la temperatura máxima del mes fue de 31,4 ºC. Fue en la jornada del 3, en un día en que la estación de Mouriscade alcanzó los 28,09 y la urbana de Lalín, los 28,02.

Era veroño, sí, pero el recorte de horas de luz ya se hacía notar, y de ahí que en esa misma jornada las mínimas cayesen en las dos estaciones lalinenses a los 3,9 grados. Son, entonces, 24 grados de oscilación térmica en la misma jornada, que hacían más que aconsejable acompañarse de prendas de abrigo, pues sólo cinco días después, en la jornada del 8, se produjeron las mínimas más pronunciadas de todo octubre; un grado bajo cero en Mouriscade y Lalín, y de -1,4 en la Serra do Faro, en Rodeiro. Incluso Camanzo, claro ejemplo del microclima cruceño que nada tiene que ver con el de Lalín, desplomó sus termómetros a los 2,33 grados.

Octubre fue un mes que prolongó el verano, pero que en su recta final no pudo frenar la llegada del frío y de la lluvia. Y tampoco de las heladas, más típicas del ecuador del invierno. Hubo hasta tres jornadas con escarcha en la Serra do Faro y a partir del día 27, es decir, desde el sábado pasado, las máximas nunca llegaron a los 10 grados en Lalín. Es más, el pasado fin de semana tuvo lugar la primera nevada del otoño y que, según el refrán, vendrá acompañada de otras seis en los próximos meses (el dicho es, literalmente, que "nieve de octubre, siete lunas cubre", y máxime si esa primera nevada coincide con la ase de luna llena, como ocurrió esta vez). Las mínimas, en los últimos cinco días de octubre, se movieron entre los 0,5 y los seis grados.

En cuanto a precipitaciones, se confirma una vez más el veroño: llovió poco, pero al menos fue el triple de lo que cayó en octubre del año pasado, cuando en general en las estaciones se recogieron en torno a 40 litros por metro cuadrado (l/m2). Pues bien, en la citada de Mouriscade Meteogalicia cifra 126,6 l/m2 de lluvia durante todo octubre, aunque solo hubo tres jornadas en las que las precipitaciones fuesen considerables. En el casco urbano de Lalín se recogieron 120,2 milímetros, mientras que en la Serra do Faro la cuantía es superior, de 140,9. Como de costumbre, es en la estación forcaricense de Pereira donde las lluvias son más notables, con 146,8 l/m2 durante todo el pasado mes. Camanzo, sin embargo, registra el valor más bajo, con 107,7. Aunque no se usa para abastecimiento, sino para producción eléctrica, el embalse de Portodemouros es un buen indicador de que no llovió lo suficiente en octubre: está al 55,5% de su capacidad, con 165 Hm3 embalsados y tras bajar 5 en una semana.