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Santos y Difuntos y La vertiente económica

Viveros y floristerías viven años de expansión avivada por un arraigado culto a los muertos

Algunos negocios dicen que el actual momento dulce del gremio les anima a ampliar sus instalaciones - Los establecimientos se refuerzan estos días o extienden su horario para atender los encargos de arreglos florales

Una tienda de Lalín que comercializa plantas y flores de sus propios viveros. // Bernabé/Javier Lalín

Las floristerías de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes hicieron esta semana su agosto con la campaña de flores y plantas para el Día de Difuntos, que se celebra mañana. Los cementerios estarán concurridos ya a lo largo de la jornada de hoy por familiares que adornarán las lápidas de sus seres queridos con color y aroma. El culto a los muertos no es un hecho de un solo día, sino que está muy consolidado en toda Galicia, algo que contribuye a la economía diaria de toda floristería, un sector que cada año va en aumento, también debido a fechas señaladas como el Día de la Madre.

Ayer era muy habitual ver a lo largo del día gente de aquí para allá portando plantas y flores para los cementerios. Las floristerías trabajaron a contrarreloj para tener listos todos los pedidos, algunos ya reservados a primeros de mes, aunque también son muchos los que esperan a última hora. Las floristerías señalan que desde hace unos años la compra de plantas en maceta es lo que más demanda la gente y, de media, lo que más compran son los crisantemos normales en maceta de tres litros que tienen un precio de ocho euros. Aunque los precios oscilan desde los tres euros a los 17 en plantas de maceta y los centros de flores, ya realizados, que también tienen mucha aceptación, gastan de media entre 30 y 40 euros.

Los gustos, también son muy variados, aunque el amarillo es uno de los más solicitados, precisamete, entre las variedades resaltan las margaritas tubular de este color, que es una de las tendencias de hace tres años, tal y como señalan desde el Viveiro Agra, de Galegos (Lalín). También, hay los que se deciden por las macetas tricolor o bicolor, que dentro de un mismo tarro tienen plantas de distintos colores. Entre las innovaciones, también figuran otras variedades, como son el crisantemo pompón, que es más delicado, tal y como señala Agra, pero más lucida y tiene un precio de 10 euros, o por dos euros más, otra de la novedad son los llamados crisantemos araña, "una planta que tiene mayor altura y es más distinta".

Aunque las flores naturales ganan la batalla por estas fechas a las artificiales, hay quien se decide también por estas últimas. "Se venden bastante porque hay gente que viene única y exclusivamente para estas fechas, entonces la flor artificial le permite que les quede hasta Navidades, o incluso, hasta el próximo verano y demandan flor artificial de buena calidad", señala Charo Senra, de la floristería homónima de Lalín. Aunque depende de la variedad, la gente en estos tipos de centros suelen gastar no menos de 30 euros.

Las floristerías cumplieron en esta campaña todas sus expectativas, algo que señalan desde los negocios consultados, que indican que la adquisición de flores y plantas para esta fecha va en aumento. Aunque ayer todavía era difícil hablarde números, desde Viveiros Agra, aseguraron que el número de plantas que cultivaron en esta campaña rondaron las 14.000. "De estas, unas 4.000 se vendieron en una docena de establecimientos dezanos, y el resto los colocamos en locales, sobre todo de Lugo, que cubrimos casi toda esa zona, y también en algunas de Pontevedra y Santiago", apunta Ana Agra. Sin duda, este es un negocio que está en auge, "porque más establecimientos, como los que solo vendían plantas de horticultura, en la campaña de Difuntos también se deciden por vender plantas y flores". Este esplendor en el gremio también lo constatan desde Esther Portela y desde la floristería Charo. "Llevamos 30 años, y de hecho vamos a reformar la tienda, para tener más espacio, empecé con un bajo de 16 metros cuadrados y ahora llegaremos a los 130", señala Senra. Las floristerías van en aumento porque manifiestan que hay mucho culto a los difuntos, tanto en entierros como a lo largo de todo el año, por las distintas ceremonias, en dónde se busca lo más original o por fechas señaladas como en el Día de San Valentín y el Día de la Madre.

Los mercados tradicionales se suman estos días a las floristerías locales para ofrecer a los vecinos un recuerdo en forma de flor. Los puestos instalados ayer en la Praza da Feira y el Novo Mercado de A Estrada fueron, por momentos, un concurrido punto de encuentro de vecinos deseosos de escoger el ramo con el que recodar a sus seres queridos en el cementerio. Del interior de la plaza no paraban de salir flores, al igual que del mercadillo que, como cada miércoles, se celebra en la villa. Para todos los gustos y de todos los colores. Hay quien se mostró tradicional y se decantó por los crisantemos de siempre y quien escogió otro tipo de composiciones o plantas para honrar la memoria de sus familiares y amigos.

En la capital de Tabeirós las floristerías han tenido que echarle horas o reforzarse estos días para poder atender todos los encargos. "Salen continuamente", apuntan desde Zarcillos. Indican que este año la flor está "impecable" debido a las condiciones meteorológicas, con un octubre que le ha venido muy bien para que estos arreglos florales luzcan mejor que nunca. Apuntan desde el sector que estas ventas "van a más", con crisantemos, rosas u orquídeas como apuestas seguras.

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