El presidente de la cooperativa Xuncoga, Manuel Fernández, y el tesorero de dicha entidad, Manuel Pichel, se desplazaron ayer a Santiago para exponerle a la directora general de Patrimonio Natural, Belén Docampo, la situación que atraviesan los ganaderos dezanos tras los daños del jabalí en cultivos. Fernández afirma, tras el encuentro, que detectó mucha preocupación por parte de Docampo, que le dio un plazo a tecores y sindicatos para que expusiesen medidas de control de esta fauna tras un encuentro mantenido a mediados de este mes. Desde Xuncoga, Fernández tiene claro que es necesario modificar la normativa para que, de ahora en adelante, también puedan abatirse madres paridas y ejemplares inmaduros. "Nosotros aceptamos un periodo de veda, pero creemos que es necesario poder disparar a todo" ya que esto forzaría a las piaras a moverse de lugar. Docampo comunicó a los cooperativistas que en 2019 volverán a convocarse ayudas para paliar o prevenir daños, con una partida global de 800.000 euros. Pero, en el caso de las explotaciones dezanas, estas ayudas no cubren los gastos del cierre de las fincas, dadas sus dimensiones, como explica Fernández.
