Veinticuatro horas después del pleno de la Mancomunidade Terras de Deza, sesión convocada para aprobar la cuenta general, las críticas al funcionamiento del organismo supramunicipal llegaron tanto por parte del alcalde lalinense como del representante de la Mancomunidad del BNG y concejal cruceño Xoán Blanco. Si antes se reclamaba, por inoperatividad, la disolución de esta entidad pública ahora ni se llega a plantear, pero no porque se esté de acuerdo con su funcionamiento.

Cuíña refrendó las críticas de Blanco a la negativa de la presidencia de incluir -era una sesión extraordinaria- una propuesta de creación de equipos comarcales para luchar contra la avispa asiática. Dijo que hubo un gesto de un representante del PP -Blanco se refiere directamente al senador José Crespo- a Luis López para indicarle que "eso no tocaba", dice el cruceño. "En el movimiento de Crespo se vieron claramente los hilos de la marioneta que mueve. Los que vivimos en el rural estamos hartos que los Manolitos (de Neira Vilas) sean de Madrid o de Santiago no permitan que abordemos una problemática tan grave", añadió Blanco, que confirmó el registro de la moción para ser tratada en el próximo pleno, no sin antes recordar que en las últimas semanas hubo varios casos de vecinos que tuvieron que ser evacuados al hospital por picaduras de este insecto. "El PP tendrá que demostrar si es rentable esta Mancomunidad que solo sirve para hacer trabajos en pistas por turnos en función de las aportaciones de los concellos", sentenció Xoán Blanco.

Mientras, Cuíña acusó a los populares de mantener prácticamente inactiva esta entidad de manera deliberada, quizá porque no gobierna en los dos municipios de mayor peso poblacional. "En los últimos tres años no se hizo nada de lo prometido", dijo, poniendo como ejemplo la posibilidad de negociar con Xunta y Diputación más maquinaria para contar con un segundo equipo.