El campamento musical organizado por la Banda de Lalín y la Escola de Música inició ayer con diversas actividades. Era uno de los más esperados por los pequeños, así fue que llenó las 40 plazas ofertadas. Algunos de los participantes ya estuvieron en la anterior edición y quisieron repetir experiencia.

En la primera jornada, aprovecharon el buen tiempo para realizar varios juegos populares y tradicionales en el parque del auditorio, utilizando las esculturas de los instrumentos que hay en el en torno. Durante la semana, conocerán los diferentes instrumentos musicales, además de hacer los suyos propios con material reciclado. También contarán con clases de acompañamiento rítmico y vivir la experiencia de estar sobre un escenario ofreciendo un concierto. Hoy, estarán con los músicos de viento madera y descubrirán instrumentos como el saxofón o el clarinete entre otros. Mañana será el turno de viento metal y el jueves será la percusión.

El último día estarán sobre el escenario acompañando a la Banda Xuvenil de Lalín durante un concierto para vivir la experiencia desde el otro lado del público.