En el presente año, los programas de Cohesión Social de la Diputación invierten 259.418 euros en las políticas sociales de los concellos dezanos, llegando a 520 beneficiarios.

Así las cosas, en este 2018 la Diputación destinó a Lalín 4.779 euros, con 80 vecinos que pueden gozar de los programas de ocio, respiro familiar y envejecimiento activo. Hay, admeás, 18 jóvenes que pudieron estar en el campamento de verano Depo Aventura A Lanzada. Lalín, al terner más de 20.00 vecinos, queda fuera del SAF y las ayudas básicas de emergencia. Silleda, por su parte, recibió, 75.318 euros, beneficiando a casi 200 residentes. Por tipos de programa, el plan de atención social atendió a 27 usuarios el año pasado, mientras que las ayudas básicas de emergencia se expdieron a 23 familias. En este 2018, el programa de teleasistencia domicilia ayuda a 2 mayores, y casi 150 participaron en los programas de ocio, respiro familiar y envejecimiento activo. Vila de Cruces recibió 57.319 euros, que cubren las necesidades de 100 personas: 26 del plan de atención social; 4 familias de ayudas de emergencia; 10 del programa de teleasistencia y 60 en programas de ocio y respiro familiar. Ya en los municipios menores, Rodeiro obtiene 29.419 euros para políticas sociales destinadas a 30 personas: 11 vinculadas al plan de atención social, 8 familias del ayudas básicas de emergencia y 6 del programa de teleasistencia. En el municipio vecino de Agolada, la Diputación invirtió 54.977 euros, entre casi 100 personas. El plan de atención social llega a 42 el año pasado, así como las ayudas de emergencia a 18 familias. Otros 14 vecinos gozan del programa de teleasistencia domiciliar y 30 personas tomaron parte en las iniciativas de ocio. Por último, en Dozón hay 20 usuarios de políticas sociales, con una inversión provincial de 37.308 euros. El plan de atención social y su SAF llegó a 13 vecinos, mientras que otras cinco familiar obtuvieron ayudas básicas de emergencia para cubrir necesidades imprevistas.