| El intercambio cultural de Silleda con las delegaciones de Canéjan y Poggio Mirteto llegó ayer a su cuarta jornada con una visita al cenobio de Carboeiro, tras cubrir la ruta de Sendeiro do Deza, y la participación en un taller de rosquillas en la parroquia de Abades. Las vecinas compartieron con los visitantes algunos de los secretos imprescindibles a la hora de elaborar este dulce. La comitiva también aprovechó, ya durante la noche, para desplazarse a las fiestas de verano de A Bandeira. Los hermanos franceses e italianos continuarán hasta mañana en tierras trasdezanas, tras una semana con visitas a distintos puntos del municipio así como de Galicia.