El BNG de Caldas de Reis denuncia nuevamente la falta de seguridad vial en la N-640 a la altura del CPI Afonso VII y la aprobación de las obras con cargo al remanente de tesorería del 2017. Entre estas obras se encuentra la de la ampliación del terreno de juego y la sustitución del césped artificial del campo del Caldas FC. Para los nacionalistas supone "un xerro de auga fría" y así lo quiso mostrar una de las representantes del equipo, que insistió en poder ir al pleno.

Miembros del Caldas FC le transmitieron al BNG que estas obras no fueron consensuadas con el club y que desconocían el proyecto que durará 3 meses y les impedirá usar su campo en la temporada regular.

Además, desde el club recalcan que las obras no contemplan los compromisos adquiridos por el alcalde en 2011 de mejorar la iluminación, la señalización del campo y la mejora del aparcamiento.

Manuel Fariña, concejal del BNG, comprobó las instalaciones y asegura que son más coherentes las reclamaciones del Caldas FC.