"Cuando empezamos a buscar pisos hace cuatro o cinco años, había alquileres por 250 o 260 euros. Conseguimos uno bastante céntrico por 280. Ahora, que buscamos de nuevo, por menos de 300 no hay nada". Es el relato de una pareja estradense que acaba de conseguir alquilar, después de tiempo buscando, un piso en la villa. Reconocen que la búsqueda fue difícil y que emplearon todos los métodos a su alcance: agencias inmobiliarias, internet y llamadas a los teléfonos de los carteles que veían en alguna que otra ventana.
"Haces una búsqueda por internet y cuando vas a verlo te dicen que no eres el primero, que hay cuatro o cinco personas mirando ese piso", indican. Añaden que la situación no permite tomar la decisión meditadamente. Exponen que en una ocasión vieron un piso nuevo disponible y en 24 horas ya estaba alquilado. "Si tardas en decidirte, te quedas sin él", señalan.
"No construyen y no hay oferta", apuntan. Reconocen que la hora de buscar piso en A Estrada "funciona mucho el boca a boca".
