La construcción de la rotonda entre las avenidas Xosé Cuíña y Madrid, a la altura del lugar de O Montserrat, en Donramiro, implicará la reorganización de las conexiones en los parte de los viales inmediatos a dicho elemento de circulación. Aunque en cierto modo el proyecto técnico ya había advertido de la conveniencia de reoganizar estas conexiones, el Concello de Lalín confirma que las vías afectadas serán las de conexión con el cementerio municipal antiguo y la calle da Fonte, en Donramiro.
En el caso del camposanto la vía de servicio que parte de la Avenida Bos Aires y que confluye en la intersección en la que se construirá la nueva glorieta quedará inutilizada y solo para uso exclusivo del cementerio. Es decir, los vehículos podrán acceder al recinto funerario desde Bos Aires, como hasta ahora, pero la calle no tendrá salida a la rotonda. El concejal de Urbanismo, Nicolás González Casares, explica que la decisión está apoyada en informes técnicos relativos a la seguridad, que descartan la posibilidad de que el tráfico rodado se incorpore a la glorieta. Además, añade, la vía en sentido descendente tiene una notable pendiente y entiende que existen otras alternativas suficientes para acceder al cementerio. Cabe recordar que desde hace muchos años, el estrecho vial solo permitía el tráfico en dirección a esta vía de circunvalación.
Una vez que los coches podrán acceder al camposanto, pero luego la calle se quedará sin salida y que esta vía es demasiado estrecha, el ayuntamiento valora la posibilidad de hacerse con una finca próxima para, al menos, permitir que los vehículos puedan realizar giros y evitar así que acaben bloqueando el paso, porque en sus actuales condiciones resulta muy complicado dar la vuelta. Aunque el acceso está garantizado, en el futuro no se descartaría, por operatividad, restringir este vial al uso exclusivo del camposanto y a las ceremonias funerarias. Las zonas más próximas de estacionamiento, aunque en casos insuficientes, se sitúan a escasos 50 metros de la entrada al recinto, a la altura de la Avenida Bos Aires.
En lo que respecta a la conexión con la parroquia de Donramiro, mediante la rúa da Fonte, quedará prohibida la salida desde el estrecho camino hacia la rotonda y solo estará permitido a los vehículos el acceso en dirección al núcleo de la Aldea de Riba y a la iglesia de esta parroquia. En este caso el proyecto técnico también concluye que las reducidas dimensiones de la calle da Fonte no reúnen las mínimas condiciones para permitir la entrada y salida, por lo que el Concello, atendiendo a la normativa aplicable en estos casos, optó por permitir el acceso desde la rotonda, porque técnicamente es asumible y también desde el punto de vista de la seguridad. González Casares indica que las decisiones se toman en base a criterios técnicos. En los accesos desde la Avenida da Estación y en dirección a O Montserrat, no habrá cambios.
La previsión del ejecutivo municipal pasa porque las obras de construcción de la rotonda den comienzo en un plazo de dos semanas y deberían estar rematadas antes en verano. La empresa Taboada y Ramos acometerá los trabajos por 161.000 euros.
