Experiencia inolvidable y sin duda volverían a repetir. Así es como definen su estancia en Italia y Malta, respectivamente, Juan Pablo Sicolo y Adrián Varela Blanco, alumnos de ciclos del IES Pintor Colmeiro de Silleda, que han realizado sus prácticas en el extranjero. Ayer los jóvenes les contaron a otros compañeros del centro su experiencia.

Juan Pablo Sicolo, natural de Vilagarcía, cursó el ciclo medio de Actividades Físico- Deportivas y viajó cinco meses y medio a Italia a través del Consorcio de la Diputación del Prácticum 2016. Sicolo ha trabajado en la empresa Activity Trentino, ubicada en Andalo, Italia. "La experiencia fue estupenda, todo positivo, porque te permite conocer gente, aprender otro idioma y es una experiencia genial", señala Sicolo. Él se marchó a Italia a finales de diciembre y regresó hace unos días.

La empresa ofrece la oportunidad de practicar deportes en contacto con la naturaleza y realizar excursiones. "Yo hacía de guía y prácticamente realizábamos una actividad diaria, siempre rutas diferentes, lo que me ha permitido conocer bastante bien todos los parques naturales y la zona es un paraíso, además de encargarme de preparar todo el material y de la interpretación del patrimonio y de la fauna local", relata el alumno de Vilagarcía. En su caso, recibió antes de desplazarse a su destino el 90% de la beca, correspondiéndose a algo más de 800 euros mensuales, además de costearle el viaje. "Yo animo a todos a que se lancen a estas experiencias, a que no tengan miedo por otro idioma, es maravilloso conocer otra cultura y yo repetiría sin duda".

Por su parte, Adrián Varela Blanco, de A Bandeira, que cursó el ciclo superior de Xestión Comercial, viajó durante dos meses y medio a Malta, a través del propio centro educativo. Él estuvo, desde mediados de marzo hasta finales de mayo, en la empresa Am Language Studio, de Sliena, Malta. "Para mí ha significado un desarrollo personal y profesional". Su función en el trabajo consistía en ir a buscar a alumnos al aeropuerto y llevarlos a dónde estaban hospedados, así como enseñarles el funcionamiento de la academia. "Además, me dieron la posibilidad de realizar un curso de inglés de cuatro horas gratis". Solía trabajar todos los fines de semana, y su horario dependía de cuando llegasen los alumnos, pero solía librar por las tardes. En su caso, la beca era de unos 750 euros en total "por lo que fueron justitos, ya que el alquiler ya me cobraban 350 euros". También, aconseja esta experiencia y destaca que el buen clima de Malta, de unos 30 grados, y que allí se conoce a gente de diversos lugares.

Por otra parte, el instituto acogerá esta tarde, con motivo del fin del curso, un taller de nutrición a cargo de Lucas Requejo. Será de 15.50 a 17.20 horas y también habrá una exhibición en el centro ecuestre As Verias.