El portavoz municipal del PP, José Crespo, formalizó su precandidatura a la presidencia local del partido, que en el congreso del 1 de julio también escogerá, por tanto, nueva ejecutiva. El plazo para este trámite se cerró ayer a las 20.00 horas, mientras que Crespo oficializó su intención de continuar en el cargo ya en la jornada del viernes.
Los precandidatos necesitan al menos 100 avales para aspirar al cargo, y Crespo obtuvo más del triple: 323. Explica que existen dos motivos por los que desea seguir al frente del partido: el primero es porque "creo que el rumbo y la gestión de Lalín de los últimos años necesita un cambio". Apunta que las mejoras que pudieron darse en Lalín desde 2015 (cuando entró en el poder el cuatripartito) son similares a las que se detectan en el resto de Galicia y del Estado. "Son mejoras a pesar del gobierno local", recalca, añadiendo que si antaño la capital dezana era envidiada por su gestión en infraestructuras o promoción de la gastronomía, sirviendo incluso de modelo a municipios de tamaño similar, "ahora no lidera nada, salvo los escándalos, porque no hay un trimestre en que no se produzcan".
El segundo motivo tiene un carácter más personal, y que en absoluto se debe "a supervivencia política o a querer atarme al sillón". Crespo, a modo de examen de conciencia en voz alta, asegura que tras perder la Alcaldía en 2015 pasó uno de sus momentos más amargos, hasta el punto de pensar en abandonar la política y después de 25 años que dejaron como herencia "el PXOM y los planes parciales de Lalín de Arriba y O Regueiriño, la circunvalación, el Lalín Arena o el consistorio". Pero en esas dos décadas y media como alcalde Crespo detectó un handicap, aunque fuese a posteriori: "me centré mucho en la gestión y menos de lo necesario en las personas. No había semana que no fuese dos ó tres veces a la Diputación y tres a la Xunta, y eso me quitaba tiempo de cercanía con los vecinos".
En la "travesía del desierto" como él llama a estos tres años que lleva en la oposición, dispuso de más tiempo para recuperar esa cercanía, que aprovechará para explicar "por qué vemos que el PP es mejor para gobernar que este cuatripartito". De hecho, adelanta que la candidatura a la ejecutiva que está perfilando va a guiarse por un lema triple: escuchar, convencer e implicar. Y en esa nueva aproximación al vecino de a pie, Crespo asegura que "muchos lalinenses me dicen que el PP debe recuperar la Alcaldía porque el cuatripartito es un desastre", al tiempo que deja caer la existencia de actitudes "mafiosas" mediante llamadas de teléfono o toques de atención "cuando surge una voz discrepante o alguien da un simple me gusta a una publicación mía en Facebook".
Y hablando de candidatura para la nueva ejecutiva, señala que en ella habrá hombres y mujeres, gente novata y con dilatada experiencia, vecinos del rural y del casco, trabajadores del agro y de la industria... "Será una candidatura equilibrada, plural y representativa" que no busca porcentajes de participación, sino qué puede aportar cada miembro.
Expectativas cumplidas
Crespo deja claro, no obstante, "que aún no llegó el momento de hablar de candidaturas a la Alcaldía. Yo estaré, o no, en los puestos de salida de esa lista electoral, pero vamos a dar la batalla" que, en cualquier caso, va a liderar un candidato o candidata solvente. Insiste en que su objetivo "es que mi equipo recupere la Alcaldía de Lalín. Vamos a buscar el mejor candidato" para recuperar el timón de Concello. Crespo añade que sus expectativas políticas a escala local "las fui cumpliendo".
