Para estar entre las mejores explotaciones gallegas por calificación morfológica hay que tener al menos 17 o más reproductoras calificadas, más del 90% de las vacas mayores de 36 meses y no superar el 5% de reproductoras inscritas en el Rexistro Auxiliar A. Las ganaderías Mato (Rellas), Fraga (Goiás), José Luis Méijome Fernández (Bermés) y Finca Mouriscade ocupan los puestos 9, 10, 12 y 18 del ránking, con entre 84,19 y 83,9 puntos. La primera es Baixo Holstein, de Sarria, con 88,23.

Tras un año en blanco, Finca Mouriscade vuelve también al listado de las explotaciones punteras por índices genéticos (ICO). La explotación que gestiona la Diputación de Pontevedra es sexta, con 2.492 puntos, por detrás de Pazos (Santiso de Lalín), cuarta, con 2.514, y por delante de Manteiga, de Oirós, que cierra el top ten con 2.427 puntos. Casa Crespo, de Lugo, lidera con 2.573.