El regidor de Agolada, Ramiro Varela, muestra el mismo escepticismo que su homólogo de Rodeiro a la hora de hablar del Plan Revitaliza. López asegura que "no podremos cumplir con la meta de 2023 si no se hace una política más fuerte por las 3 R", es decir: reciclar, reutilizar y reducir. En Agolada "planes como el de la Diputación no funcionan, porque es que ni hay espacio para colocar un compostero comunitario", señala Varela. En este municipio se repartieron también 50 pequeños composteros de Sogama por las aldeas, e incluso el propio regidor tiene uno en su finca. "Pero lo que tenemos que hacer es mentalizar a los vecinos de que, como antaño, los restos de comida pueden darse a los animales en lugar de ir al contenedor". Sí existe, en cambio, más concienciación a la hora de separar el vidrio y el cartón.
Pero la idea de que todo vale para el contenedor verde está tan asentada que en Dozón se han llegado a encontrar en los depósitos de materia orgánica hasta restos de partos o incluso patatas, a pesar de que se colocan bandos de forma periódica para evitar este tipo de situaciones. Dozón se está planteando sumarse al Plan revitaliza, que no descarta una nueva apertura de adhesión de municipios. Quien de momento no lo valora es Vila de Cruces. Su alcalde, Jesús Otero, está contento con la gestión de Sogama y no se queja del uso que hacen los vecinos de los contenedores de orgánica.
