Las Brañas de Xestoso serán escenario, el domingo 20 de mayo, de una de las rutas ornitológicas que organiza la Diputación, en colaboración con Seo Birdlife, a través de la campaña Voando nas Rías Baixas. Las personas interesadas en participar podrán presentar su solicitud hasta el viernes 18 en la página web de la entidad provincial o en sus registros de Pontevedra y Vigo. Las plazas son limitadas, ya que el grupo no puede exceder de treinta personas al tratarse de una actividad que no pretende ocasionar impacto ambiental sobre la zona.

La ruta para avistar aves en este espacio comprendido entre los municipios de Silleda, A Estrada y Forcarei será guiada por personal especializado de Seo Birdlife, que facilitará el material para poder divisar las diferentes especies y aportará información sobre la importancia de los humedales. Este espacio natural, protegido por la Red Natura 2000, contempla amplios llanos o chairas que históricamente permanecían encharcados todo el año. En estos terrenos húmedos que caracterizan las marismas se han conservado pequeñas áreas de turberas y zonas anegadas por las lluvias.

Entre las chairas más conocidas está A Lagoa Sacra de Olives, formada por una pequeña depresión del terreno a unos 650 metros de altitud y que, normalmente, solo está seca en verano. Resultan muy curiosos los muros de piedra que rodean el espacio inundable, que la leyenda atribuye a una barrera contra la profanación de los cadáveres arrojados al agua tras una antigua batalla.

La de las Brañas de Xestoso será la última ruta del programa Voando nas Rías Baixas, que arrancó en enero en el complejo intermareal Umia-O Grove y llegó en febrero al estuario del Río Miño y Foz da Ramallosa. La fecha elegida, 20 de mayo, es más tardía, debido a la llegada de aves en primavera para criar. Escribano cerillo y montesino, alondra común, zorzal charlo o triguero son algunas especies que pueden observarse en este ecosistema, junto con otras migratorias procedentes de África, caso del alcaudón dorsirrojo o el bisbita arbóreo.

La campaña, enmarcada en el plan estratégico de la Diputación, es una oportunidad para diversificar el turismo en la provincia y sensibilizar a la ciudadanía local sobre la necesidad de preservar estos espacios protegidos.