Los estradenses Miguel Pereira Pola y Dori Carbia regresaban ayer de Logroño con la sensación del deber cumplido. Tanto uno como otro se embarcaron en una aventura que culminó el pasado domingo con su participación en el Campeonato de España Norte de Culturismo. Ni uno ni otro lograron meterse en la final de un torneo de gran nivel pero destacaron la gran experiencia vivida y la satisfacción personal tras muchos meses de trabajo y sacrificio.

El caso de ambos era totalmente diferente. Dori Carbia se estrenó en una competición de físico culturismo hace solo unas semanas con su participación en el Campeonato Gallego celebrado en Valga, en la que terminó subiendo al podio. La estradense viajaba a Logroño como punto y final a su aventura personal, que inició hace meses con el objetivo de vivir la sensación de subirse a un escenario. En este campeonato nacional sin embargo se encontró con un nivel muy alto entre sus rivales y no pudo pasar el corte.

"Quedé encantado con Dori. Lo hizo muy bien en una competición con un nivel brutal y además con un problema añadido", explicó el entrenador personal Miguel Pereira Pola. "En esta semana realizó un trabajo de afinamiento que hizo que el bikini le quedase un poco grande. A pesar de eso estuvo fantástica y muy cómoda en todo momento", valoró.

El propio Pereira fue el protagonista de la segunda parte de esta historia. Mientras preparaba a su discípula, el entrenador aceptó el reto de volver a subirse a un escenario para competir. La última vez que lo hizo fuera en 2013. Años antes ya se había proclamado campeón en esta misma competición, aunque en la categoría de culturismo. En esta ocasión competía en Men´s Physique. "Los criterios son diferentes y me costó encontrarle el punto a las poses", reconoce.

A pesar de ese contratiempo, Pereira terminó contento con su actuación, aunque lamentó no haber pasado a la final. "Me sentí muy cómodo pero lo cierto es que contaba con llegar a la final. Me veía mejor que los demás pero no me metí. Incluso llegué a pensar que podía pelear por ser campeón, aunque viendo las fotos después creo que los tres primeros tenía un nivel muy alto", explicó el entrenador de Pro-Fitness. "Me quedó un regusto amargo pero ha sido una gran experiencia, especialmente por verme ahí arriba y sentirme competitivo. Llegaba con el físico que quería", reconoció un hombre que tuvo poco tiempo para preparar de manera específica esta competición nacional.