La historia de las fuentes en el casco urbano de A Estrada tiene también sus propias anécdotas. Si algunas terminaron sus días bajo el cazo de una excavadora, otras no pasaron de ser un proyecto. En el año 1891, tal y como recoge un artículo publicado en A Estrada. Miscelánea Histórica e Cultural por Isabel Carlín Porto, se proyectó una fuente dedicada a Neptuno, si embargo esta nunca llegó a construirse.

La información disponible no es clara sobre los motivos que hicieron que finalmente la pieza ideada por Antonio Crespo para una A Estrada que aspiraba a reunir dotaciones y edificios acordes a su florecer como villa no llegase a materializarse. La obra diseñada medía más de seis metros. De inspiración mitológica, estaba dedicada al dios Neptuno, contando con un pilón octogonal engalanado y una pilastra toscana. Dos delfines se incorporaban al a pieza como surtidoras de agua. Sin embargo, los estradenses nunca contemplaron esta fuente, que pasó a la historia sin que muchos supieran siquiera que un día se proyectó.