Ya hace un par de días que el que fue uno de los otoños más secos del siglo dejó paso al invierno. En concreto el cuarto Unos 300 litros por metro cuadrado (l/m2) cayeron entre el 21 de septiembre y el mismo día de este mes, un total de 28 días de lluvia, la mayor parte en el mes de diciembre, que, sin duda, ayudó a mejorar unos datos que iban camino de ser récord en cuanto a sequía. A pesar de que la información varía según la estación meteorológica que se analice, en esta ocasión, se tomará como referencia la colocada en el casco urbano de Lalín.
La cantidad registrada en esta ocasión supera por poco al pasado otoño, el tercero más seco en lo que va de siglo, en el que se certificó 273 milímetros. Este valor ya fuera muy inferior con respecto al 2015, cuando se registraron 379 milímetros de 2015, tan solo os datos de 2001, con 146 milímetros, y los de 2007, con 157, además de los del pasado año, superan los de este Otoño. En total, llovió durante 28 días, pero de forma copiosa, es decir, más de 10 milímetros, fue sólo durante ocho jornadas. Para darnos una idea de hasta qué punto hubo escasez de lluvia, basta con pensar que los valores normales para que un otoño sea lluvioso suelen duplicar a los que se obtuvieron en este 2017. Por ejemplo, en el año 2006 cayeron nada menos que 878,4 milímetros de lluvias, según la estación meteorológica de Mouriscade.
Para entender hasta qué punto escasearon las lluvias, basta con ver los datos de la estación meteorológica de la zona en la que más llueve: la forcaricense de Pereira. En los últimos tres meses, en este complejo se recogieron 450 l/m2, repartidos de forma muy desigual: 8,4 litros en septiembre, 55,8 en octubre, 116,2 en noviembre y 266,3 en el presente mes de diciembre. Pero es que el 2015 en Pereira las precipitaciones alcanzaron los 767,4 milímetros, y en 2014 la cuantía aún fue superior, en concreto el doble que en el presente otoño, al alcanzar los 977,4 litros.
Está claro que el otoño no ha sido otra cosa que la prolongación de un verano seco, del que ha copiado incluso las temperaturas. Tanto en septiembre como sobretodo en octubre se mantuvieron unas temperaturas anormalmente altas. En el pasado mes de octubre se registró la temperatura más alta de esta estación. El día 15 el mercurio llegó a los 28,8º. Esta jornada fue en la que se proclamó una ola de incendios que afectó a toda la comunidad. En este mes de diciembre, la temperatura más alta fue de 15,9. Las noches, cada vez más largas, motivaban que las temperaturas mínimas también fuesen muy acusadas: 7,8 grados en septiembre fue la más baja, que en octubre marcó 4,1, en noviembre 1,1 grados bajo cero y en diciembre -1,5. Ello motivó que tanto jardines, parques, mobiliario urbano y coches que habían pasado la noche a la intemperie amaneciesen bajo un manto blanco de heladas. Hasta un total de 27 cuantificó la estación meteorológica de Mouriscade.
Debido a que los valores de las temperaturas máximas fueron excepcionalmente altos para esta temporada del año, las oscilación térmica fue significativa: 13,7 grados para los últimos días de septiembre, 24,7 en octubre, 20.6, para noviembre y 17.4 en diciembre.
