El Concello de Agolada liquidó las cuentas de 2016 con unos datos de los ingresos por tributos muy semejante a los del ejercicio anterior. Aunque existen algunas variaciones, en el algún caso positivo y en otro negativo, por norma general, las tasas recaudadas por el ayuntamiento son muy similares, aunque ligeramente superiores a las de las cuentas de 2015. Puesto que aunque, por ejemplo, los Impuestos de Bienes e Inmuebles (IBI) lleguen a la cuantía de 213.187 euros, alrededor de unos 5.000 euros más que el ejercicio anterior que alcanzó la cuantía de 208.250. Sin embargo lo ingresado por el Impuesto sobre Bienes Inmuebles de Características Especiales (BICES), la administración local ingresó en torno a 21.000 euros menos el pasado ejercicio.
De esta manera se desprende el balance económico, ya con los datos definitivos, del presupuesto elaborado por el gobierno liderado por Ramiro Varela. Si desgranamos las partidas presupuestarias del año pasado nos encontramos que no solo la contribución urbana tiene unos ingresos superiores al de 2015, ya que por ejemplo, el IBI de naturaleza rústica ha sufrido un incremento de un 84%, al pasar de una recaudación de 9.138 euros en 2015, a 16.851 euros, de los cuales están pendientes de cobro más de 3.000 euros. Lo mismo pasa con los ingresos por las tasas de Construcciones, Instalaciones y Obras, que se ha recuperado del revés sufrido en 2015 donde bajó exponencialmente hasta recaudar 4.428 euros. En el pasado ejercicio, el Concello de Agolada ingresó por ese impuesto 29.305 euros, es decir, 25.00 euros más que el año anterior. Si bien, por el servicio de alcantarillado se ingresaron 4.794 euros, mientras que en la cuenta anterior no existen datos de ésta actividad, igual que en por servicios asistenciales por lo que se percibió 48.547 euros.
Otros tributos, sin embargo, han quedado prácticamente igual. Entre ellos hay que destacar el IBI, pues es el tributo por el cual el Concello ingresa más cuantía. En esta ocasión, la recaudación ha sido un 2% superior en el último ejercicio, pasando de los 208.000 euros en el 2015 a los 213.187 euros en el pasado año. En este apartado también hay que incluir el servicio de abastecimiento de agua. Por él la institución recaudó 400 euros más que en el ejercicio anterior, pues fueron 25.000 euros los que se aportaron en 2016 por este impuesto. Siendo todavía la mitad de lo recaudado en 2014 cuando se llegó a los 54.000 euros. El servicio de recogida de basura también es muy semejante en ambos años, apenas 1.000 euros los distancia. En 2016 fueron 96.204 euros y 97506 euros en 2015. Lo mismo ocurre con el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica y en el impuesto sobre actividades económicas (IAE). En el primero de ellos tan hay solo 200 euros de diferencia. En el último ejercicio se embolsaron 110.821 euros. Por su parte, se recaudó en 2016 por el IAE 49.000 euros, mientras que en el ejercicio anterior fueron 50.800 euros.
Sin embargo lo ingresado por los Bienes e Inmuebles de Características Especiales (BICES) que en el 2016 han recaudado un total 70.951 euros, un 30% menos que en el año anterior, cuya cuantía alcanzó los 92.500 euros.
Además de tener en cuenta la partida de ingresos, también es necesario explicar la relativa a los gastos más destacados. En caso del desembolso por el servicio del alumbrado público se ha disminuido en un 13%, asimismo la cifra alcanza los 151.000 euros, lo que significa aproximadamente 22.000 euros menos que en el 2015, que alcanzó los 173.000. En cuanto a la recogida, gestión y tratamiento de residuos el gasto ha supuesto un ligero descenso en el gasto, pues en el último ejercicio se cuantificó un saldo de 71.471 euros, principalmente referidas por cuotas de gasto, casi 10.000 euros menos que en el ejercicio anterior que resultó ser de 82.000 euros.
