El estudio concluye que el papel de los padres en uso responsable de internet por parte de los adolescentes "sigue siendo una materia pendiente". Tan solo el 38,5% controla o limita el uso que de él hacen sus hijos, lo que coincide con los altos porcentajes de uso a partir de las doce de la noche o incluso en los centros y en las aulas. "No hay un límite real; no se establecen normas y límites del uso del móvil en casa y en el aula", apunta Rial.

También son "preocupantes" los datos referidos al juego on-line y al contacto que los menores tienen con desconocidos a través de la red. El 81% de los alumnos consultados jugó a videojuegos en línea y el 7,8% dice haber apostado dinero en juegos de azar en línea o webs de apuestas. El 12,2% asegura haber quedado en persona con gente que conoció a través de Internet, el 5,3% envió vídeos o fotos personales con contenido erótico-sexual y el 15,87% dice haberlos recibido. El 7,9% admite haber sido coaccionado para enviarlos y el 1,2 chantajeado para hacerlo. Una de cada cuatro víctimas también es acosadora. El 12,6% de los adolescentes presenta un uso problemático de internet, con riesgo de una posible dependencia.