"El desarrollo y comercialización del dron híbrido marca un punto de inflexión, supone un salto cualitativo tanto para los servicios profesionales como para el desarrollo en general del sector", explica Jaime Pereira. El artefacto ha sido desarrollado por la empresa que dirige y cuenta con un sistema único capaz de trasladar hasta cinco kilogramos de peso durante dos horas y media y de volar cuatro horas sin carga. Tras un año de estudio y desarrollo junto a ingenieros estadounidenses, la aeronave ha superado con éxito numerosas horas de vuelo y está preparada para su comercialización, prevista para el próximo mes.

Aerocámaras, creada en Lalín y con sede en Ourense, apuesta por el desarrollo propio de drones después de consolidarse en el mercado de la formación de pilotos como la empresa con mayor número de alumnos (más de 2.0000) de España. Desde la compañía consideran que es "vital" superar las barreras para profesionalizar todavía más el vuelo no tripulado. "A la hora de hacer actuaciones de emergencias, rescates o inspecciones en sectores como electricidad, topografía o agricultura es imprescindible contar con la mayor autonomía de vuelo posible -explica Pereira-; esto permitiría desplazamientos más largos en cuanto a distancia y afinar todavía más los estudios".

Hace un par de años, Aerocámaras comprobó que existía un problema con las baterías y la autonomía de los drones. "Imagínate buscar a una persona o un barco con quince minutos de autonomía, apenas eres capaz de peinar un área", subraya el empresario lalinense. El proyecto fue cogiendo forma y la empresa buscó partners, que finalmente acabaron siendo ingenieros americanos, para construir un dron completo que ofreciese fiabilidad. Tras un año de prueba, desarrollo de motores y trabajos enfocados a aligerar peso, medidas adecuadas y estabilizar la nave, Aerocámaras consiguió desarrollar el producto y testarlo con diferentes sensores para que el dron pueda especializarse en subsectores como agricultura de precisión, emergencias, rescate acuático, transporte de mercancías, focos de incendios, seguridad, topografía o localización y búsqueda de desaparecidos, furtivos o bancos de pesca. Las pruebas fueron realizadas en el Pazo de Villamarín, cedido por la Diputación de Ourense, en donde tiene lugar la formación de pilotos. La empresa ya realiza servicios profesionales enfocados a emergencias, agricultura de precisión o inspecciones técnicas, siendo la primera del mundo en obtener datos en un mismo vuelo con cámara HD, térmica y sensor ultravioleta.

El desarrollo del híbrido supone una mejora en lo que a complementos se refiere, ya que se reduce el coste dedicado a baterías y cargadores, además del esfuerzo que conlleva su transporte. La legislación actual solo permite moverse a 500 metros del dron, pero con el cambio de ley -previsto para este otoño-, se podrán hacer desplazamientos "a 50 kilómetros de distancia para realizar servicios de todo tipo, como rondas de vigilancia, inspecciones, transporte o localización terrestre y marítima, entre otras materias", expone Pereira.