Siempre pasa. Cualquier fiesta o evento lúdico trae a la memoria a aquéllos que ya no están para compartirlo. Y si la fecha en la que partieron aún está reciente, el sentimiento se agudiza aún más. Es lo que explica el tremendo respeto que centenares de lalinense mostraron ayer durante el minuto de silencio que se guardó en recuerdo de Francisco Varela Vilariño, el joven de 23 ayer que se encargaba de la percusión en la charanga Ardores y que falleció en accidente de tráfico en una carretera de Antas de Ulla el pasado 19 de agosto, cuando regresaba de una actuación en la localidad de Láncara.

El homenaje, previsto en el Kilómetro 0 del casco urbano, tuvo que trasladarse a la carpa ubicada en la Praza da Vila debido a la lluvia. Allí, uno de sus compañeros agradeció la asistencia de todos y anunció que decidieron declinar la invitación para tocar en las fiestas patronales, pero que volverán para el año. Tras el minuto de silencio, una miembro de la comisión entregó un ramo de flores a su hermano José Luis, que también sufrió heridas durante el siniestro de tráfico y que ayer acudió acompañado por su padre.

Ardores tocó un par de temas junto a compañeros de otras dos charangas, Kilómetro 0 y Verbeneros. La música invitaba a bailar, pero nadie lo hizo, tal era la emoción que embargaba a todos los presentes. Una emoción que se prolongó una vez acabado este mini concierto, ya que nadie se movía, respetando las palabras de cariño que mostraron a los familiares tanto la comisión como los músicos allí presentes. La gente solo accedió a desalojar la carpa cuando alguien explicó que había que colocar las sillas para el concierto de la Banda Militar de Marín.

Sin actividades infantiles

La música, a decir verdad, reinó durante todo lo que quedaba de jornada. Tras este recital, la Banda Municipal de Lalín y la Banda da Tasca, en el monumento junto a Loriga. Por la noche, la orquesta New York hizo varios pases en la rúa C, mientras que Cinema actuó en la Praza da Igrexa.

La lluvia y también el frío sí consiguieron frustrar, por otra parte, algunos de los actos incluidos en el programa festivo del domingo. Si bien permitió que se celebrase la procesión con la imagen de la patrona por las calles más céntricas, la amenaza de precipitaciones obligó a los organizadores de la Feira do Vento a prescindir de las actividades infantiles que tenían preparadas para la tarde: la actuación del mago Damián y de Barafunda Animación así como los pases de alumnas de Máisquedanza y Scene Ballet. Sí hubo, en cambio, un taller de customización de gorras, por la mañana, en la calle Colón.