El consistorio lalinense acogió ayer una reunión convocada por el edil de Actividade Agraria, Xosé Manuel Hermida, para abordar los múltiples daños del jabalí en el municipio y poner en común medidas para atajar esta problemática. Contó con la presencia del presidente de la sociedad de caza, Julio Mariño, así como con representantes de Unións Agrarias y de cooperativas. Hermida hizo referencia "a la buena disposición de la sociedad de caza, siempre favorable al inicio de cacerías para paliar los demoledores efectos de la especie". Anunció que esta entidad está esperando por los permisos para las batidas, que podrían comenzar este domingo día 20. Pero esta propuesta "no es de todo satisfactoria", pues a su juicio la autorización de Medio Ambiente llega ya con innumerables daños. En caso de autorizarse finalmente esta batida, "llegaría solo una semana antes de la fecha oficial de inicio de la temporada de caza de jabalí.

También subrayó que la reunión sirvió para canalizar el malestar generalizado ante la amenaza de este animal sobre los cultivos y se concluyó que Lalín debería ser declarado como zona de alto riesgo por los desperfectos habidos y así podrían autorizarse batidas con mayor facilidad. Insistió en que todos los afectados realicen las correspondientes reclamaciones ante Medio Ambiente, aunque los daños no sean cuantiosos, como único modo de se permitan acciones de control mediante estas denuncias. Dijo que tanto Concello como cooperativas y sindicatos tienen a disposición de los ganaderos y asesoramiento necesario para tramitarlas.

Finalmente, indicó que desde el Concello se mantendrá un contacto permanente con la Sociedad de caza, pero también con los ganaderos para afrontar esta problemática. Y avanzó que ta se trabaja en nuevas propuestas con el fin de que se pueda realizar un control de la especie en las zonas de mayor riesgo.